madrid. El Ministerio de Asuntos Exteriores y las ONG con proyectos en los campamentos saharauis de Tinduf (Argelia) han sentado las bases para que haya un regreso "progresivo" de los cooperantes a esta región después de la evacuación que se llevó a cabo hace una semana por una amenaza de secuestro.
El portavoz de la Coordinadora de ONG al Desarrollo (ONGD), Antonio González, informó de que los colectivos de ayuda al pueblo saharaui coordinarán con Exteriores los protocolos de seguridad para reducir los riesgos todo lo posible cuando reanuden su actividad.
Esta medida se concertó en las reuniones mantenidas esta semana entre Exteriores, la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (Aecid) y las ONG después del malestar suscitado en este colectivo por la repatriación de los voluntarios debido a un aviso de secuestro inminente.
González valoró que el departamento que dirige José Manuel García-Margallo sea comprensivo con las demandas de los cooperantes y se avenga a entablar una vía de colaboración para volver con garantías a los campamentos. "El Gobierno está preocupado, pero la impresión es que entiende que hay que seguir atendiendo a la población saharaui y trabajar en un marco que permita cuanto antes restablecer las operaciones de todas las organizaciones", explicó el portavoz de ONGD. "Partiendo de posturas distintas, se ha encontrado un camino para recorrer conjuntamente compartiendo el análisis del problema", añadió.
El plan trazado, según González, es "hacer una entrada progresiva". "Unas ONG irán antes y otras más tarde, con el compromiso de ir construyendo un marco de seguridad conocido y compartido", explicó.
excesivA Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación habría reconocido durante las reuniones mantenidas esta misma semana con las ONG que la retirada de los cooperantes fue "demasiado radical", según han informado fuentes de las organizaciones prosaharauis. "Ahora reconocen que eso que decían de la evacuación inmediata por el riesgo de secuestro no es tanto, que la retirada total de los cooperantes ha sido demasiado radical", explicó la fuente.
Tras asumir esta postura, Exteriores Incluso se habría planteado que los cooperantes trabajen desde Tinduf, pero las ONG lo habrían rechazado por considerarlo muy complicado. "Hay que buscar otra solución", señaló. En ese sentido, equipos técnicos de las ONG están manteniendo contactos con expertos en seguridad de la AECID para poner en marcha un nuevo protocolo de seguridad.