Vitoria. Inmerso en el traje de portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Alfonso Alonso tampoco olvida su condición de presidente de este partido en Álava, una doble perspectiva que cree compatible y que le sirve para criticar la negativa del Gobierno Vasco a aplicar en la CAV las medidas aprobadas en Madrid por el Gobierno de Mariano Rajoy.
El exalcalde de Vitoria ofreció ayer en esta capital una mezcla de diagnóstico y augurio ligado siempre a la complicada situación económica. Como no podía ser de otra manera, defiende a capa y espada al presidente del Ejecutivo español y su habitual imagen blandiendo tijeras, medidas que Alonso justificó frente a los medios de comunicación para tejer una red a la que asirse en lugar de seguir cayendo en el pozo de la incertidumbre. Pero para el dirigente popular vasco resulta doloroso que el Gobierno se encuentre precisamente en el País Vasco con la díscola respuesta de Patxi López, situado por su partido tras el declive de las últimas elecciones generales como uno de los principales arietes autonómicos frente al poder de Moncloa.
Entrando en materia, Alonso asumió la impopularidad de medidas como el copago farmacéutico -en vigor desde ayer-, pero acusó al lehendakari de negarse a aplicar esta subida en los precios de los medicamentos con receta -los jubilados tienen que pagar por primera vez los fármacos prescritos- para ahorrar en otros servicios como la atención médica, dos posturas que el dirigente del PP resume con un escueto: "es mejor ahorrar en medicinas que ahorrar en médicos".
Advirtió que tras la postura de López en esta materia se esconde una "falta de liderazgo" que siembra de "inquietud" el futuro de los vascos, quienes aún desconocen cuándo volverán a ser llamados a las urnas para elegir a sus gobernantes.
Al margen de los escollos detectados en Lehendakaritza, Alonso trasladó un mensaje de esperanza después de constatar que cada agente ha cumplido con su cometido. Y es que el portavoz popular está convencido de que el Gobierno "ha ejercido su liderazgo en Bruselas", mientras que en el ámbito estatal se ha llegado a "importantes acuerdos entre el PP y el PSOE" para consensuar la postura que España debía defender ante el Consejo Europeo en pro de la búsqueda de salidas a la situación actual.
