Vitoria. El Gobierno Vasco presidido por Patxi López echó a andar con la Ley Municipal como proyecto estrella. Tres años después, el Ejecutivo autonómico intentará salvar el reto que abanderó aunque sea bajo el sonido de campana que marque el final de la legislatura.

"Hay margen". Así lo estima el secretario general de Presidencia, José Manuel Salinero, sobre todo después de que la Comisión Arbitral desbrozara el camino la semana pasada para continuar con la tramitación del proyecto de ley. El revés a los recursos presentados por las diputaciones de Bizkaia y Álava, además del de las Juntas Generales de este último territorio, dejan vía libre para la andadura parlamentaria de la iniciativa, aunque para lograr consolidarla los socialistas deberán granjearse el apoyo de PNV o PP; precisamente, los dos partidos que controlan las diputaciones alavesa y vizcaína.

De momento, el Gobierno Vasco ha hecho sus deberes y ha solventado el único escollo detectado en el proyecto por el órgano encargado de resolver los conflictos competenciales entre las administraciones vascas, el referido a la gestión de las vías urbanas, eliminando este apartado del proyecto.

Así las cosas, en los próximos días se reanudará un proceso paralizado durante cinco meses cuyo primer paso será el levantamiento de la suspensión a cargo de la Mesa del Parlamento Vasco. Continuará con la constitución de una ponencia que promueva el consenso, hoy por hoy inexistente, entre las partes.

En esta tesitura, Salinero afirmó que ya ha mantenido contactos posteriores al dictamen de la Comisión Arbitral con todos grupos parlamentarios -salvo Aralar, con quienes hablará en los próximos días- para presentar las líneas rojas del Gobierno en la negociación. El estrecho colaborador de López señaló a este periódico que en los citados encuentros explicó a los grupos la "necesidad" de que los ayuntamientos tengan presencia en el Consejo Vasco de Finanzas y el que la Cámara legislativa participe en el reparto de fondos municipales y no sólo las diputaciones como ocurre hasta la fecha. De esta forma, Salinero argumentó que el color político de cada diputación no afectará a la mayor o menor ayuda económica que puedan recibir las diferentes localidades.

Salinero no quiso entrar en polémicas valorando si detrás los recursos presentados al proyecto de Ley Municipal existían razones políticas para atacar al Gabinete López, pero demandó que en el momento actual se debe "hablar de verdad" para acabar con las duplicidades.

No obstante, sí echó la vista atrás para reclamar al diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, una "rectificación formal" por criticar la actitud del magistrado y presidente de la Comisión Arbitral, Juan Luis Ibarra, en este asunto.