vitoria. Tras el periodo vacacional de Semana Santa, uno de los primeros asuntos que deberá abordar el Parlamento Vasco es la creación de la ponencia para la paz y la convivencia, una iniciativa que vio la luz el pasado 30 de marzo. Desde el grupo de Aralar, promotor de la moción que dio paso a la ponencia, esperan que Arantza Quiroga, presidenta de la Cámara, convoque a los grupos a la mayor celeridad posible, si puede ser la próxima semana, para dar forma a esta ponencia.
Una de las interrogantes que se mantienen abiertas es si la ponencia de paz contará con un presidente. El popular Carmelo Barrio ya se ha postulado para presidir este organismo encargado de debatir las consecuencias generadas por la violencia de ETA, y aunque desde algunos medios se ha apuntado a que Aintzane Ezenarro, autora de la moción que dio origen a la ponencia, también está dispuesta a presidirla, desde su grupo parlamentario aseguran que su intención es que esta ponencia, en la que estarán representados todos los grupos del Legislativo, no tenga presidente. "La base puede ser la ponencia de víctimas policiales, donde no hubo presidente y el trabajo, sin embargo, no se resintió para nada", señalaban ayer a fuentes cercanas a los parlamentarios de Aralar.
En clave interna, Ezenarro y otros dos de los cuatro aforados de este partido en la CAV continúan a la espera de la decisión que tome la Comisión de Garantías sobre su exclusión tras las desavenencias en torno a la citada ponencia.
