BEIRUT. Al menos 19 civiles murieron ayer en Siria cuando las fuerzas de seguridad atacaron varias ciudades del centro del país, poco antes del vencimiento del ultimátum de la Liga Árabe a Damasco para que acepte el despliegue de observadores, informaron fuentes opositores desde Líbano. El régimen volvió a atacar Homs y Deir al Zour. En esta última localidad murieron al menos tres de las víctimas. Además resultaron heridas un centenar de personas, informaron los opositores. Según la agencia de noticias estatal Sana, otras 140 personas fueron arrestadas. Por su parte, los servicios secretos perdieron a cuatro de sus efectivos en Hama. En las últimas horas se están llevando además a cabo ataques y registros para capturar a los desertores que en los últimos días atacaron edificios del gobierno, según informaron los activistas. En una de esas operaciones, el Ejército también entró en Shayzar, que previamente había atacado con artillería pesada. También atacaron Maaret al Nemaan, cerca de la frontera con Turquía, con el mismo objetivo de arrestar a desertores. El ultimátum de la Liga Árabe a Siria para cesar la represión y permitir la entrada de observadores terminó anoche. La organización amenazó con sanciones económicas si Damasco no cumple. El viernes, Damasco pidió un cambio en las condiciones de la misión de observadores, exigiendo la modificación de 18 cláusulas.

condiciones "Siria se niega a permitir la entrada de observadores en hospitales y prisiones y no quiere activistas civiles en la misión", dijo un diplomático árabe en condición de anonimato. Además, al parecer insiste en que personal de la seguridad siria acompañe a los observadores durante la misión. Un portavoz del opositor Consejo Nacional Sirio acusó ayer a Al Assad de estar perdiendo tiempo para "matar a más gente". "Este régimen está jugando con el tiempo, pensando que eso puede aplastar el levantamiento", dijo Bassima Kaddamani a la cadena Al Yazira. Más de 3.500 personas han muerto en Siria desde el inicio de las protestas contra el régimen de Bashar al Assad a mediados de marzo. >dpa