Donostia. El consejero de Interior del Gobierno Vasco, Rodolfo Ares, entregó ayer al exsecretario general de la ONU y Premio Nobel de la Paz, Kofi Annan, un documento con el decálogo que el lehendakari, Patxi López, presentó en el Pleno de Política General por "la libertad y la convivencia democrática".
Ares mantuvo un encuentro con Annan de forma previa al inicio de la Conferencia de Paz a petición de los organizadores de la cita. Según confirmaron fuentes conocedoras de la reunión, la cita, de carácter protocolario, se prolongó durante un breve espacio de tiempo.
Lo que hizo el consejero fue algo similar a lo que repetirían los representantes socialistas que acudieron a la Conferencia. Eguiguren y el alcalde de Ermua, Carlos Totorika, entregaron a los dirigentes internacionales las líneas marcadas por López en septiembre, al tiempo que les recalcaron que "en Euskadi no ha existido ningún conflicto violento con dos bandos enfrentados" sino un "ataque deliberado y sistemático de una banda terrorista".
El exsecretario general de la ONU y Premio Nobel de la Paz, por su parte, pidió en la reunión que la violencia sea remplazada por el diálogo y la política para resolver el conflicto vasco, en torno al cual instó a "no olvidar las injusticias del pasado".
En su discurso durante el foro, Annan se mostró "feliz" y "agradecido" por la invitación e insistió en que se desplazó a título personal hasta Donostia, con la "firme creencia" de que "la enemistad entre los pueblos no dura, y no puede durar, para siempre".
Annan indicó que, como ha constatado recientemente en su visita a Kenia, para construir una "paz duradera" es necesario afrontar "las causas subyacntes del conflicto". Con este objetivo, "todos los actores de la sociedad deben jugar su parte".
"Pasar página" Por otro lado, el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, pidió en su intervención acotada a tres minutos que "decida y comunique cuanto antes su definitiva desaparición" y afirmó ante los representantes internacionales que Euskadi necesita la ayuda de las instituciones europeas "para pasar esta página negra". A su juicio, son necesarios "ojos y oídos que verifiquen la veracidad de un desarme, manos y pies que aproximen distancias, sellen compromisos y que rubriquen un devenir de respeto, derechos humanos y convivencia".
El secretario general de EA, Pello Urizar, utilizó su turno de intervención para proponer la constitución de una mesa de partidos para tratar el "conflicto político" y de otra mesa "técnica" en la que ETA y los Estados español y francés discutan sobre "presos" y "desarme".
A juicio del también dirigente de Bildu, esta tarea debe "realizarse en ausencia total de violencia y en torno al diálogo político y las vías democráticas".