En una rueda de prensa celebrada en Donostia, en la que ha estado acompañada del diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, y del diputado de Política Social, Ander Rodríguez, Ugarte ha asegurado que, para ella, es "bastante difícil" comparecer para hablar de su vida privada, al tiempo que ha señalado que no se esperaba encontrarse con estas "injurias y calumnias" hacia su persona al acceder a la vida pública.
Tras criticar que se haga uso de su "persona para atacar a Bildu", se ha mostrado "decepcionada", tanto con el medio de comunicación que ha publicado la información, como con la actitud de la portavoz socialista, Rafaela Romero.
Además, ha destacado que está "muy dolida" porque "duele a cualquiera" que "ataquen la vida personal" de alguien "de manera injusta, usando un dato para tergiversar una realidad" y la presenten como que ha cometido un fraude "en un tema tan sensible como las prestaciones sociales".
No obstante, ha remarcado que está "muy contenta" de formar parte del equipo de Gobierno foral de Bildu y ha asegurado que tiene "muchas ganas de trabajar". "Nadie va a conseguir echarme de aquí por las bravas sólo porque me difamen personalmente, porque estoy preparada para este tipo de ataques y para muchos más", ha subrayado.
La portavoz foral ha explicado que recibió prestaciones sociales, ya que solicitó la renta básica en octubre de 2005, tras haber tenido a su primera hija en agosto de ese año y su marido encontrarse en prisión. De este modo, ha relatado que le correspondían las citadas ayudas porque, aunque había puesto en marcha su bufete de abogados, "no tenía entradas de ingresos suficientes" como para poder mantenerse ella y su hija.
De este modo, ha manifestado estar "muy orgullosa" de haberlas solicitado porque, podría haber pedido ayuda a sus padres, "pero son gente sencilla, de clase trabajadora", y ella quería sacar a su familia "adelante" con sus propios medios. "Y para eso existen esas ayudas", ha apuntado.
"DERECHO SOCIAL"
"Nadie pide estas ayudas por gusto ni se ha enriquecido por recibirlas y es la única cosa que hace una persona porque pedir a nadie nos gusta", ha insistido, al tiempo que ha destacado que estas ayudas son "un derecho social conseguido desde la izquierda". "Por suerte, salí de esa situación y, cuando llegó el día en que no necesité esas ayudas, yo misma dije que no las necesitaba", ha asegurado.
La diputada foral ha apuntado que este procedimiento funciona con carácter retroactivo y, tras realizar el ajuste correspondiente, se me comunicó que le "tocaba menos de lo que había percibido". "La cuantía inicial era de 12.539,22 euros y, tras el recurso que presenté, se me ha comunicado que el pago final que tengo que abonar es de 5.664,43 euros, y que estoy dispuesta a abonar", ha señalado.
En cuanto a la publicación en el Boletín Oficial de Gipuzkoa (BOG) de la resolución en la que le reclama ese dinero al no haber podido ser localizada, Ugarte ha insistido en que está "localizada" y no tiene "nada que ocultar".
A su juicio, el hecho de no haber recibido las notificaciones se ha debido a "un problema de administración por mala gestión de la Diputación", algo que le ha "perjudicado" ya que le complicará presentar un nuevo recurso.
Finalmente, ha manifestado que le "duele especialmente" que una persona "que se considera de izquierdas, como es Rafaela Romero, diga que prestaciones sociales, licenciados y fraude van unidos". "Creo que sólo puede venir del desconocimiento o desde la mala fe. Cuando no hay nada, inflamos globos y, luego, ya se desinflarán con el tiempo, ésa es su actitud y creo que se ha precipitado", ha resaltado.
Tras agradecer la "cautela y prudencia" del PNV y PP sobre este asunto y el hecho de que no la hayan "juzgado con tanta ligereza, Larraitz Ugarte ha insistido en que "el daño" que ha sufrido "está basado en una mentira". Finalmente, ha anunciado que Bildu ha pedido su comparecencia conjunta con el diputado general en las Juntas para explicar este asunto.
"CONFIANZA"
Por su parte, Martin Garitano, ha expresado su "apoyo y confianza" en Ugarte, y ha denunciado que "se ha intentado manchar el nombre" de la portavoz foral, en un caso de "juego no limpio contra Bildu". "No vamos a ocultar nada porque no tenemos nada que ocultar", ha asegurado.
Finalmente, Ander Rodríguez ha explicado que se trata de un procedimiento administrativo "absolutamente ordinario y muy común" que se deriva de la actual regulación de la renta de garantía de ingresos y de la anterior regulación de la renta básica. "No es algo excepcional ni incorrecto", ha insistido.
En esa línea, ha apuntado que, durante el año 2011, el departamento de Política Social solicitó devoluciones de los denominados pagos indebidos por valor de más de tres millones de euros y, sólo entre enero y agosto de este año, se han realizado 2.672 solicitudes de devolución de importes de la renta de garantía de ingresos, "lo que significa una media de 11 solicitudes de devoluciones diarias".
"Trasladar a la ciudadanía el mensaje de que estos 2.672 guipuzcoanos han percibido ayudas o prestaciones de manera fraudulenta y decir que están cometiendo una estafa, demuestra un desconocimiento un absoluto del funcionamiento de la prestación o, lo que es peor, de mala fe", ha considerado.
Tras criticar que el PSE crea que los preceptores de ayudas sociales "son unos parias, una casta inferior de la sociedad, sin oficio ni beneficio y que les damos una ayudita por caridad", ha pedido a los socialistas que "bajen a la realidad", al tiempo que ha señalado que, en la actualidad, en Gipuzkoa 10.130 personas cobran la RGI: "madres, padres, licenciados, personas paradas, trabajadores y todo tipo de casuística".