madrid. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el del Congreso, José Bono, rindieron ayer homenaje al último presidente de la II República, Manuel Azaña, y al primer presidente del Gobierno tras la dictadura, Adolfo Suárez, por haber forjado las bases de la historia democrática. En el acto institucional se colgaron los retratos de Azaña y Suárez, dos cuadros que se sumarán a los 46 de la galería de eminentes personajes políticos. Zapatero recordó que ambos siempre supieron que "ningún proyecto de convivencia puede construirse sobre el miedo y la amenaza" y que "la libertad no es un puerto seguro", sino un camino exigente. En la imagen, Carrillo y Zapatero contemplan los retratos. Foto: efe
