Washington. El informe que Naciones Unidas encargó a un grupo de expertos sobre la intervención de Israel contra la Flotilla de la Libertad da una de cal y otra de arena a las partes enfrentadas. Según una copia a la que ha tenido acceso el diario The New York Times, los expertos designados por el organismo internacional creen que la actuación de Israel fue "excesiva y desproporcionada", sin embargo, tambien coincien en que el bloqueo naval a Gaza que aplica Israel es "legal y apropiado" y señalan que las fuerzas israelíes se vieron obligadas a usar la fuerza al encontrarse "con un grupo de pasajeros que ofrecieron una resistencia organizada y violenta".

El informe, que no se ha publicado aún de manera oficial, lamenta la pérdida de vidas humanas, tacha de abusivo el trato que los soldados israelíes dieron a los pasajeros y recomienda a Israel que pida disculpas a Turquía y pague una compensación. El portavoz de Naciones Unidas, Eduardo del Buey, aseguró el jueves ante la prensa que el informe sería entregado al secretario general del organismo, Ban Ki-moon, en los próximos días después de que su finalización se haya aplazado en numerosas ocasiones.

Los párrafos introductorios del informe, de 105 páginas, defienden la necesidad de Israel de aplicar un bloqueo a las aguas de Gaza, ya que el país se enfrenta "a una amenaza real contra su seguridad por parte de grupos milicianos de Gaza". Añaden que el bloqueo es "una medida de seguridad legítima para evitar que entre armamento por mar a Gaza" y que su defensa por parte de las fuerzas israelíes cumplió "con los requisitos del derecho internacional". De cualquier modo, el informe critica a Israel por el ataque porque, afirma, existen "pruebas forenses que indican que la mayoría de los fallecidos recibieron múltiples disparos, incluso en la espalda y a corta distancia".

Además, es también crítico con la manera en que el resto de pasajeros fueron tratados tras el incidente, ya que concluye que fueron sometidos a "maltrato físico, acoso e intimidación", y que se les confiscaron "injustificadamente" sus pertenencias y se les negó "una rápida asistencia consular". Pese a ello, el informe ataca también con dureza a los responsables de la flotilla al asegurar que sus integrantes actuaron "temerariamente al tratar de romper el bloqueo naval" sobre Gaza y señala que, aunque la mayoría de los pasajeros de la flotilla no tenían intenciones violentas, no se puede decir lo mismo de la ONG islámica turca IHH, quien la fletó.

"Existen graves preguntas acerca de la conducta, la naturaleza y los objetivos de los organizadores de la flotilla, particularmente la IHH", indica el texto, que señala que los comandos israelíes se tuvieron que defender de los ataques violentos con que fueron recibidos sobre el barco de bandera turca Mavi Marvara. El texto también asegura que, pese a que el Gobierno turco trató de disuadir a los organizadores de no tratar de romper el bloque, "pudo haber hecho más" para conseguir ese objetivo.