madrid. Farmaindustria considera que el nuevo Real Decreto Ley aprobado ayer en el Pleno del Congreso de los Diputados para reducir el déficit público, que incluye un paquete de medidas de política farmacéutica, supone un "durísimo golpe" para la industria española, y advirtió de que "repercutirá negativamente sobre el empleo y las inversiones en I+D, poniendo en riesgo la viabilidad de muchas compañías españolas".
"No se puede exigir tanto a un sector y ponerlo en una situación límite para sostener la sanidad y las cuentas públicas", señaló la organización en un comunicado, en el que cifra en cerca de 5.000 millones de euros el impacto total de los tres decreto ley que "en 18 meses" afectaron al sector. Según apuntaba tras la aprobación de estas medidas en el Consejo de Ministros del pasado viernes, estos 5.000 millones de euros equivalen a un 30% del mercado de la industria, a lo que sumó los "graves efectos" que están teniendo para el sector algunas medidas de política farmacéutica adoptadas por "ciertas" comunidades autónomas. En este contexto, augura que se producirán nuevos recortes en el empleo, después de que en el último año "se hayan perdido ya" más de 5.000 puestos de trabajo directos y otros 15.000 entre indirectos e inducidos, así como en las inversiones en I+D. En opinión de Farmaindustria, la solución a las "tensiones financieras" de las comunidades autónomas, que afectan de manera especial a la sanidad, "no pasa por más recortes a la industria, sino por dotar al sistema público de salud de más recursos económicos que acaben con la histórica insuficiente financiación del mismo, y lograr ahorros a través de una mayor eficiencia en el gasto sanitario en otras muchas partidas".
En este sentido, consideró que el paquete de medidas aprobado "no soluciona dichos problemas financieros e incluye iniciativas innecesarias desde el punto de vista económico", entre las que citó la generalización de la prescripción por principio activo.
La industria farmacéutica reclamó que se instrumenten los mecanismos necesarios para que los ahorros que se van a producir redunden en beneficio de la sostenibilidad financiera del Sistema Nacional de Salud y "no vayan a cubrir otras partidas del gasto público ajenas a la sanidad". También pide que sirvan para pagar la deuda contraída con los proveedores del sistema, que ya supera los 5.400 millones de euros.
fabricantes de genéricos Por su parte, la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (AESEG) rechazó también las medidas y entendió que las políticas de promoción, prescripción y dispensación de los medicamentos deben ser una "competencia exclusiva" de cada comunidad, ya que son éstas las que deben decidir "la opción más eficiente que considere en salvaguarda de la consecución de sus intereses".
Cuando se dió el visto bueno a estas medidas ya lamentaban también que el resto de ajustes incidan "una vez más exclusivamente en el recorte del gasto de medicamentos", sin considerar el impacto negativo que ya ha sufrido la industria farmacéutica de innovadores y genéricos en el último año.
Por último, la secretaria de Bienestar Social, Marisol Pérez, negó ayer "absolutamente" que las medidas aprobadas por el Gobierno de Zapatero sobre ahorro, eficiencia y mejora de la calidad de la prestación farmacéutica limiten el acceso de los ciudadanos a los medicamentos.