Donostia. La alcaldesa de Andoain, Ane Carrere (Bildu), y el concejal del PSE en el municipio y exalcalde de la localidad, Estanis Amutxastegi, trataron ayer en la calle el conflicto derivado por la prohibición del ayuntamiento a la entrada de los escoltas en la casa consistorial. Los dos representantes se habían citado a las 8.30 horas en el Consistorio de la localidad para reconducir la situación y tuvieron que reunirse fuera ante la negativa del concejal socialista de entrar sin que un guardaespaldas supervisase las dependencias municipales. De hecho, fue la propia Policía local la que impidió la entrada del escolta, quién avisó a la alcaldesa de la decisión de Amutxastegi.
Carrere defendió impedir la entrada de los escoltas en el consistorio porque la situación actual es "normal" y añadió que la Policía municipal es "suficiente" para garantizar la seguridad de los ediles amenazados. Asimismo, la alcaldesa de Andoain se responsabilizó "en primera persona" de que a los concejales "no les pase nada". En la reunión, Amutxastegi replicó a la dirigente de Bildu que la normalidad "que ella dice" no existirá, mientras ETA siga presente, a lo que Carrere aseguró que ella ni la coalición tenían "nada que ver" con esto.
El concejal socialista explicó que antes de que entre a cualquier lugar, uno de sus guardaespaldas suele acceder primero para registrarlo y le indica si es un lugar seguro. Por eso, Amutxastegi pidió que se permita el acceso de uno de sus escoltas para que revise las dependencias del consistorio. Posteriormente, el escolta bajaría y se quedaría fuera del ayuntamiento como ha ocurrido "casi siempre", según expuso. Esta petición adquirió más importancia para los socialistas después de que Carrere mandase retirar el detector de metales y el escáner de la casa consistorial. Ante esto, la alcaldesa dijo a Amutxastegi que le daría "unas vueltas" a la propuesta y que le llamaría. A pesar de ello, el concejal socialista se declaró "insumiso", por lo que no entrara en el ayuntamiento hasta que no puedan hacerlo sus escoltas. Posteriormente, el vicepresidente del Gobierno español, Alfredo Pérez Rubalcaba, afirmó en Madrid que el problema de los escoltas y la coalición abertzale "ya se está resolviendo". Rubalcaba añadió que Bildu es un partido que "está en la democracia".