vitoria

JORGE Hank Rhon, un extravagante empresario y político mexicano del Partido Revolucionario Institucional (PRI), ha estado siempre bajo sospecha. Antes de ser elegido alcalde de Tijuana (2004-2006) se le vinculó al homicidio del periodista Héctor Félix Miranda -su exguardaespaldas está preso por ese crimen-, pero nunca se le imputaron cargos por ese caso; en 1995 fue detenido en el aeropuerto del DF tras un viaje a Japón debido a que en su equipaje se encontraron animales exóticos y en peligro de extinción, fue acusado de contrabando, pero finalmente absuelto; en 1999, un informe del Centro Nacional de Inteligencia sobre Drogas de Estados Unidos lo vinculó con el narcotráfico y el lavado de dinero, pero la entonces secretaria de Justicia estadounidense Janet Reno desacreditó el documento. El pasado 4 de junio, Hank Rhon, dueño de hoteles, centros comerciales y casinos, y propietario de un zoológico privado, fue detenido durante un operativo militar en una de sus viviendas, en la que se encontraron 88 armas, 49 de ellas de uso exclusivo del Ejército, y 9.000 cartuchos. Su arresto ha durado poco. Este martes era puesto de nuevo en libertad por falta de pruebas y porque una jueza consideró que había "inconsistencias" en la versión del Ejército sobre la detención.

El nombre de Jorge Hank Rhon se asocia desde hace años al cártel de Tijuana, pero nunca se han demostrado estos supuestos vínculos. Tras la última detención, la fiscalía mexicana lo investigó por delincuencia organizada, pero lo único que ha logrado este caso es enfrentar a esta instancia con la justicia. Unos consideran que la detención del exalcalde está motivada por razones electoralistas, por la amistad que une a Hank Rhon con el favorito para ganar las elecciones presidenciales del próximo año, el priista Enrique Peña Nieto; otros aseguran, en cambio, que se trata de un episodio más de la lucha entre las mafias que "tienen controlado al estado mexicano".

guerra perdida Sin embargo, este último escándalo ha puesto, una vez más, en entredicho a las fuerzas de seguridad, la justicia y a las autoridades mexicanas, enfrascadas en una guerra contra el narcotráfico que a todas luces está fallando. "El crimen organizado tiene capturado al estado mexicano, al igual que ocurrió en Rusia, en México el crimen se ha institucionalizado", explica Edgardo Buscaglia, asesor de Naciones Unidas en temas de seguridad. Según este experto, los principales pilares de estos grupos son "la protección política, la social y la económico-empresarial, que les permite lavar patrimonialmente; si les haces caer un pilar, se cae el edificio criminal". Sin embargo, en México no se está combatiendo ninguno de estos pilares. "El 65% de las campañas electorales están financiadas por los cárteles. Cada grupo criminal financia a un alcalde, a un gobernador. No se toca su patrimonio, ni sus empresas", señala. Así, cuanto más poder tenga un grupo criminal, mayor será su influencia. Por ello, Buscaglia insta a combatir a la mafia dentro del mismo Estado, "que ahora apoya al cártel de Sinaloa". Los grupos criminales mexicanos están poniendo en riesgo el "proceso democrático" no solo en México, sino también en Centroamérica y varios países sudamericanos. "En la medida en que los grupos criminales te gestionan el estado y te gestionan los procesos electorales, lo que se está manifestando no es la voz del pueblo, sino la voz de las mafias", advierte.

crimen organizado global Hace un año, la ONU advertía de que "la delincuencia organizada se ha globalizado, convirtiéndose en una de las primeras potencias económicas y armadas del planeta". En el mundo existen alrededor de 75 grupos criminales que actúan a escala internacional y que operan con 23 tipos diferentes de delitos. El tráfico de drogas, el de seres humanos, de armas o la piratería son algunos de ellos. Las principales mafias son la ruso-ucraniana, la china y la mexicana; esta última es la que más ha crecido en los últimos años y ya opera en 52 países, entre ellos España. En el continente americano tienen presencia en todos los países: "En Brasil tienen una presencia más patrimonial, a través de empresas legalmente constituidas en el sector de la construcción; en Argentina están más presentes a través de centros de producción de efedrina y de drogas sintéticas en el norte del país, en Chaco, Mendoza y Formosa; en el caso de Bolivia controlan las fuentes de insumos", explica Buscaglia.

Este experto, que ha investigado durante años la delincuencia organizada en México y Afganistán, asegura que en todos los países hay delincuencia organizada. "La diferencia entre México y Finlandia es que en Finlandia los grupos criminales saben que no pueden meterse en cierto tipo de delitos ni ejercer violencia, ya que la probabilidad de que se les sentencie es muy alta". Los grupos criminales lo que hacen es "atrasar el proceso democrático en las naciones en transición". "En Rusia, el estado gestiona a una cantidad de grupos criminales que realizan sus transacciones económicas con total impunidad; en el caso mexicano, se trata de un frenesí, donde los grupos criminales están devorando al estado y lo están paralizando".

Otros de los países amenazados por este fenómeno es Paraguay. "El presidente Fernando Lugo está llevando a cabo una tarea positiva, pero su gobierno está muy fragmentado y no puede implementar políticas públicas adecuadas, y el resultado es que varias porciones del estado están siendo amenazadas por el crimen organizado". Eso sin mencionar a los países centroamericanos o los africanos, un continente en donde los propios grupos criminales promueven los conflictos armados para sacar ganancias.

En el Magreb, las células terroristas se abastecen de grupos criminales, pero en muchos casos, además, esas mismas células son grupos criminales que secuestran y se dedican al tráfico de personas. "Se da un fusión entre los dos fenómenos", apunta Buscaglia. Desde hace unos años, África se ha convertido en una de las principales rutas de la droga en su viaje hacia Europa, lo que está transformando el continente en un importante centro criminal. El año pasado, la oficina sobre drogas de Naciones Unidas advirtió de que la mercancía confluye en el desierto del Sahara, creando nuevas rutas de tráfico a lo largo de países como Chad, Níger y Malí. África Occidental es conocida como un importante punto de tráfico para la cocaína de Sudamérica que pasa de contrabando hacia Europa, sin embargo, según la ONU, hasta 35 toneladas de heroína afgana también están siendo traficadas hacia África Oriental al año.

Si en México, los grupos criminales están en guerra por el control de más "pedacitos del estado", Afganistán es un país que ya está totalmente capturado.