Madrid. La estrategia del PSOE ahora que se ha dilucidado el futuro de José Luis Rodríguez Zapatero, es tratar de ganar terreno, minar al adversario y minimizar los efectos que un proceso de primarias pudiera tener de desmoralizante en la base electoral del partido. Y es el propio jefe del Ejecutivo el encargado de marcar camino. Ayer, en la reunión que presidió la ejecutiva socialista (como secretario general), Zapatero quiso incidir en el mensaje de que su sucesor "tendrá más legitimidad democrática" que el líder del PP, Mariano Rajoy. La base de este argumento es sólo una: el propio proceso de primarias internas socialistas frente al "dedazo" que impera en el PP.
Fue el secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, el encargado de hacer público este mensaje y, según él, Zapatero incidió en que el hecho de que el próximo candidato sea elegido en unas primarias es "determinante para el éxito electoral". Según otras fuentes de la dirección socialista, esta idea fue acompañada de un símil deportivo: "Debemos aprovechar la fuerza del contrario en beneficio propio, como en el judo, ahora que el partido de Rajoy se ha quedado desorientado" tras la renuncia a la reelección. La teoría de Zapatero es que el PP estaba concentrado en criticarle a él, "y en eso había depositado todas sus fuerzas". Con su decisión de retirarse, el PP "se ha quedado sin saber" qué hacer con toda esa fuerza que empleaba contra él.
respaldo Zapatero también se mostró muy satisfecho por cómo han salido las cosas y por el hecho de que se hayan respetado sus tiempos, tal y como había pedido en varias ocasiones. Tras insistir en que su decisión no ha sido fruto de la improvisación, el secretario general del PSOE elogió la reacción "serena" que han tenido tanto sus compañeros de la dirección como los militantes y simpatizantes del partido, tal y como -según dijo- pudo constatar en el mitin en Murcia el domingo.
La estrategia caló en los suyos. La cita, según las fuentes citadas, se desarrolló en un ambiente "de muy buen ánimo" y los comentarios fueron con "Zapatero está que se sale". Incluso algunos dirigentes socialistas fueron más allá en ese discurso de dar la vuelta a la tortilla y pregonan que el anuncio de Zapatero ha tenido un "efecto euforizante" en el partido. "Ha pillado con el pie cambiado al PP y ha permitido al PSOE recuperar la iniciativa", resumían.
La portavoz del Comité Electoral del PSOE, Elena Valenciano, destacó que "el PP sólo disparaba a Zapatero, y ahora no sabe a quién disparar", y puso como ejemplo las declaraciones "tan fuera de tono" de los dirigentes del partido de Rajoy durante este fin de semana. Quienes no hablaron ayer fueron ninguno de los dos nombres que con más fuerza suenan como sucesores (Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba) que pese a estar en la Ejecutiva se han conjurado con la máxima expresada por Marcelino Iglesias: "Las primarias son para el verano, como las bicicletas".
programa El otro tema que centró la cita de ayer fueron las elecciones municipales. Al respecto, el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, presentó la guía de campaña que todavía no está perfilada por completo, pero que prevé utilizar el Plan E como uno de los argumentos estrella. Fue Iglesias quien desarrolló el mensaje ante los medios valorando que el mandato socialista "ha sido el de mayor inversión en los municipios, gracias a la decisión del Gobierno de usar a los ayuntamientos como herramienta para luchar contra la crisis y generar puestos de trabajo". Así, recordó los 13.000 millones de euros invertidos en los dos fondos locales, que se han repartido de una forma "aséptica" según habitantes y no "colores políticos".