EL lehendakari Patxi López lanzó ayer gravísimas acusaciones en sede parlamentaria contra este periódico, tratando de desacreditar de forma burda el trabajo de sus profesionales y la credibilidad de los mismos, si bien tuvo que reconocer, ante la evidencia documental de las informaciones, lo publicado, esto es, que la actual delegada del Gobierno Vasco en Chile y Perú y exalcaldesa de Lasarte-Oria se ha hecho con un patrimonio de cinco propiedades inmuebles en Somoto, una de ellas, de un millón de metros cuadrados, adquirida a la ONG que tutelaba desde la alcaldía, como ha quedado meridianamente demostrado en lo publicado, violando los códigos éticos en el mundo de la cooperación.
Hay que recordar al lehendakari del Gobierno Vasco que la investigación que se ha realizado sobre la gestión, cuando menos irregular, de los fondos de cooperación de Lasarte-Oria y las propiedades inmuebles en Somoto tiene su origen en lo publicado por otros medios hace ya cuatro años y que es, tras visionar los vídeos de Youtube en donde Ana Urchueguía demuestra un talante neocolonial con los campesinos, cuando desde GRUPO NOTICIAS se activa el interés profesional por conocer en toda su amplitud lo que no son solo rumores o secretos a voces sino un clamor tanto en Lasarte-Oria como en el mundo de la cooperación.
nuevas investigaciones Es momento de volver a recordar al lehendakari que las irregularidades en el dinero gestionado por Lasarte-Oria a Somoto ha provocado la primera comisión de investigación en la historia democrática de Euskadi relacionada con fondos de cooperación. Eso no son inventos de este periódico, que no ha sido el primero que ha tratado de arrojar luz sobre este asunto, aunque sí quien ha llegado más lejos, que no al final, porque las variantes y nuevas vías que se van abriendo según se va avanzando en la investigación no dejan de asombrar por su nivel de indignidad. De ellas, se seguirá informando cuando se tenga la información contrastada y verificada con total rigor periodístico, tal y como se ha hecho en todo lo publicado.
Sobre la sorprendente intervención de ayer, hay que asegurar al lehendakari que cuando habla sobre "noticias insidiosas en torno a Ana Urchueguía", todo lo afirmado y publicado es rigurosamente cierto y está contrastado y acreditado, bien con documentación oficial o bien mediante testigos con el máximo rigor y ética periodística. Dado que el lehendakari afirma que se han publicado "falsas entrevistas", este periódico afirma que todas son verdaderas, con conocimiento de todas las identidades por parte de los profesionales que las han elaborado y que han sido emitidas en Onda Vasca. En una de las entrevistas, se ha guardado el anonimato de la mujer que fue entrevistada en Somoto, porque ella manifestó su temor a represalias por parte del círculo creado por Ana Urchueguía en Somoto, al que calificó como "muy peligroso". El secreto profesional de los periodistas en un derecho que ampara estas prácticas cuando el testimonio es crucial para la información, algo que el lehendakari desprecia.
López asegura que se ha engañado a personas que aparecen en la información, una vez más sin aportar ninguna prueba, cuando todas las personas que han hablado de forma voluntaria, como lo atestiguan los audios de las entrevistas que estos días se han podido escuchar tanto en Onda Vasca como en las webs de los periódicos del Grupo Noticias.
Tenga por seguro el lehendakari López que el problema que estamos encontrando es exactamente el contrario, la imposibilidad de publicar numerosos testimonios ante el temor poco disimulado de somoteños, tanto en el municipio nicaragüense como en Euskadi, y de vascos a posibles represalias por la amplia red de clientelismos de todo tipo creados por Ana Urchueguía.
López fue más allá con graves acusaciones al afirmar que "intentaron comprar con dinero respuestas inducidas contra Ana Urchueguía". La afirmación es absoluta y radicalmente falsa ya que en ningún momento se ofreció dinero a nadie y menos aún para inducir respuesta alguna a favor ni en contra de Ana Urchueguía. Sobre el testimonio firmado por el capataz de la finca de Las Sabanas, al parecer ante notario, este periódico se reafirma en que el enviado especial a Somoto no escribió en ningún momento cafetales, ni lo reseñó en su crónica, sino que se relataban en la descripción del camino que conduce de Somoto a Las Sabanas. Sobre la extensión de la finca, todo lo escrito es lo recogido a viva voz como queda demostrado en los audios.
"testimonio estrella" Este periódico desmiente también de forma categórica que "los periodistas se ha hecho pasar por parientes de doña Ana", como insinuó ayer López ya que en ningún momento nos identificamos como parientes, ni allí ni en ningún lugar, y hay testigos de aquellas conversaciones que piden que se respete su anonimato por temor a represalias. En contra de lo que afirmó López, Mauricio Canija no es "testimonio estrella", sino uno más de entre la veintena de personas que fueron preguntadas sobre el uso que Ana Urchueguía hizo en Somoto de los fondos de cooperación.
Este periódico quiere mostrar su preocupación por la situación de Pedro Jesús Díaz Torres, capataz de la finca de Ana Urchueguía, ante el temor que haya declarado esas falsedades ante el notario de Somoto presionado por el grupo de personas colaboradoras de Ana Urchueguía en Somoto, a cuya cabeza se encuentra Aquiles García, un hombre que va habitualmente armado.
GRUPO NOTICIAS se reafirma en todo lo publicado hasta la fecha y adquiere el firme compromiso de seguir investigando, a pesar de las dificultades, en todas las irregularidades que hayan podido cometerse en la gestión de fondos de Lasarte-Oria en cooperación.
Por otro lado, el jueves por la noche llegaba a diferentes direcciones de correo electrónico del Grupo Noticias, un mensaje, desde una dirección del Gobierno Vasco sin identificar, una carta "por indicación de la Sra. Urchueguía que mañana (por ayer viernes), recibirán por correo certificado". El archivo recibido desde Lehendakaritza no aparecía firmado con lo que la carta será publicada cuando sea enviada con la preceptiva identificación.