SEVILLA. En una entrevista con Canal Sur Televisión recogida por Europa Press, el ministro, preguntado sobre si ve a Sortu presentándose a las próximas elecciones municipales, ha indicado que ve a esa formación presentado los estatutos, que es lo que ha hecho, y que serán examinados por su ministerio, igual que lo hará, en el ejercicio de sus competencias, la Fiscalía.

A este efecto, según ha indicado, hay que tener en cuenta dos cosas fundamentales, la primera que, a pesar de lo que digan los estatutos, ETA sigue existiendo, y en segundo lugar, "que no basta con buenas intenciones escritas en un papel, sino que es necesario cumplir todas y cada una de las exigencias que establece la ley".

"Nosotros vamos a velar con rigor por que esas exigencias se verifiquen y se cumplan, y si vemos que no se cumple cualquiera de esos requisitos, lo llevaremos a los tribunales, que son, en un Estado de Derecho, quienes tienen la última palabra para determinar la legalidad o ilegalidad de un partido político", ha indicado.

Ha recalcado que no sólo hay que verificar el contenido de los estatutos de Sortu, sino que la Ley de Partidos Políticos, específicamente exige que la nueva formación, aunque tenga unos estatutos que parecen ajustarse a la legalidad, no puede "ser una secuencia de organizaciones ilegalizadas anteriores".

"Por tanto, no basta solo con la letra de los estatutos, sino que hay que verificar todos los requisitos que estable la ley", según ha indicado Caamaño, quien ha apuntando que la Abogacía del Estado y la Fiscalía lo "van a hacer con los informes pertinentes".

Preguntado sobre si le hubiera gustado que Sortu hubiese pedido la disolución de ETA, el ministro ha recalcado que "por supuesto", si bien ha señalado que, de todas formas, es un "avance o un paso en positivo de la izquierda abertzale el que se está dando en este momento, que como tal hay que valorarlo, pero creemos que todavía es un paso insuficiente".

La historia de los últimos años nos pone de manifiesto, según ha añadido, que la ilegalización de la izquierda abertzale, en concreto, Batasuna, "ha servido para llegar a la situación en la que hoy nos encontramos, que es una de las mejores situaciones en la lucha contra el terrorismo en nuestro país". Para el ministro, los demócratas tenemos que mantenernos firmes en la defensa de los derechos, de la libertad y de lucha por la convivencia pacífica, y son "otros los que tienen que mover pieza.