vitoria. El Araba Buru Batzar del PNV anunció ayer que interpondrá una querella contra el secretario general y portavoz del Partido Popular en las Juntas Generales de Álava, Javier de Andrés, quien "de manera pública acusó al PNV de cometer diferentes delitos con intención de menoscabar el buen nombre del partido y denigrarle ante los ojos de la sociedad en general, así como de sus afiliados y afiliadas en particular".

Los jeltzales, que han presentado ante el Juzgado una demanda para la celebración de un acto de conciliación previo a la interposición de la citada querella, denunciaron la existencia de "una campaña de acoso y derribo contra sus representantes, sin precedentes en el ámbito político alavés". El ABB explicó que, "con la única intención de dañar la imagen del PNV, en un año de contienda electoral, se le está acusando expresamente de la comisión de delitos de extorsión, cobro fraudulento de dinero público y espionaje a adversarios políticos, así como a agentes sociales y económicos alaveses".

Ajeno a la demanda del PNV, el PP siguió ayer criticando la actitud de los nacionalistas en la gestión del caso Miñano. El secretario general de los populares vascos, Iñaki Oyarzábal, afirmó en ETB que no ha habido "un liderazgo" del presidente del Euzkadi Buru Batzar, Iñigo Urkullu, que "no ha dado un golpe encima de la mesa para poner orden en su partido". Oyarzábal recordó que está imputado "el núcleo duro de confianza del PNV en Álava" y criticó que la Comisión parlamentaria de investigación transcurra "con problemas" porque determinados imputados y testigos "no están colaborando en la medida en que lo deberían hacer".