parís. La exdirigente de Batasuna Aurore Martin, de nacionalidad francesa, cuya entrega a España confirmó el Tribunal Supremo galo el pasado miércoles, anunció ayer en una carta al Journal du Pays Basque su intención de esconderse para evitar que se cumpla la orden dictada.

Martin, de 31 años, está acusada de "participación en una organización terrorista" por la Audiencia Nacional española por su implicación en el partido independentista vasco. En su misiva aseguró que no tiene intención "de someterse a las autoridades españolas ni de facilitar a Francia la ejecución de su orden de detención europea".

Asimismo, precisó que piensa continuar con su actividad política en el seno de Batasuna, escondida en Iparralde, "gracias a los numerosos apoyos" con los que dice que cuenta.

Martin afirma que está decidida "a luchar" y acusó a la Justicia de Francia y de España de "aplicar decisiones políticas" con el objetivo de "ilegalizar de hecho Batasuna y toda la izquierda abertzale por el Estado francés". Según afirma, Batasuna multiplica "sus esfuerzos en favor de un proceso democrático de resolución del conflicto".

La exdirigente abertzale agregó que no habrá "solución justa ni definitiva" mientras Francia no reconozca la existencia política del País Vasco del Norte, pues "todos los actores del conflicto deben poder participar en este proceso con toda normalidad".

El pasado miércoles, el Tribunal Supremo rechazó el recurso presentado contra la sentencia del Tribunal de Apelación de Pau, que el 23 de noviembre se había pronunciado a favor de la entrega a España de Martin, en relación con sus actividades políticas en territorio español entre 2005 y 2008.