madrid. El Senado vetó ayer en primera instancia (lo hizo en la comisión del ramo) los Presupuestos Generales del Estado para 2011 gracias al voto conjunto del PP, CiU y BNG. Esto no quiere decir que el veto sea definitivo, sino más bien probable, ya que es previsible que los tres grupos mantengan la misma postura en el pleno que celebrará la Cámara Alta el próximo día 13, con lo que el veto entonces sí sería definitivo y las Cuentas de 2011 deberían volver al Congreso de los Diputados para ser aprobadas allá definitivamente gracias al pacto PSOE-PNV-CC entre el 21 y el 23 de diciembre.

La Comisión de Presupuestos del Senado debatió ayer las cinco propuestas de veto presentadas (PP, CiU, ERC, ICV y BNG) y aprobó el de los nacionalistas gallegos por 14 votos a favor y 12 en contra. El veto del BNG fue apoyado por el PP (12 votos), CiU (1) y el del propio senador nacionalista gallego que ejercía como portavoz del Grupo de Senadores Nacionalistas. Los 12 votos en contra fueron 10 del PSOE, 1 de Entesa Catalana y 1 del Grupo Mixto, el de Patxi Tuñón, senador autonómico por. La postura de Tuñón se explica por el hecho de que el veto imposibilitará el debate de sus enmiendas que, de ser aprobadas, supondrían una inversión adicional del estado en la Comunidad Foral de 4,9 millones de euros.

Cuando el debate llegue al pleno del senado, el veto deberá contar al menos con 132 votos, aunque en principio no habría obstáculo para ello puesto que PP, CiU, ERC, ICV y BNG suman 137 senadores. De ratificarse este veto sería la cuarta vez que unos presupuestos generales del Estado son rechazados por el pleno del Senado desde que José Luis Rodríguez Zapatero es presidente del Gobierno.

medidas Este veto se produjo un día antes de que el Consejo de Ministros apruebe el nuevo plan de medidas contra la crisis entre las que destacan la supresión de la ayuda de 426 euros a los parados de larga duración, la bajada de impuestos a las pymes y la privatización de la gestión de los aeropuertos de Barajas y El Prat. De las reacciones que se produjeron en la jornada de ayer destaca la de Cayo Lara, coordinador general de IU, quien aseguró está "justificada" la convocatoria de una nueva huelga general. En rueda de prensa, Lara pidió una movilización social de los trabajadores porque considera que las reformas anunciadas por Zapatero, son "inútiles" e "injustas" al estar "encaminadas" en la dirección de generar "más crisis, sufrimiento" y "más paro".

Desde el PP su presidente en Andalucía, Javier Arenas, aseguró que las nuevas medidas no son reformas sino "parches" que, a su juicio, dejan "al desnudo" el discurso del PSOE "de oposición a la oposición" en lo que se refiere a recortes sociales y privatizaciones. "Las privatizaciones y los recortes sociales son los dos ejes que ha utilizado el PSOE para hacer oposición a la oposición", sentenció.