Bilbao. La retirada, el próximo lunes, de 83 escoltas privados de sus labores de acompañamiento a personas amenazadas en la CAV y Nafarroa, que el Ministerio del Interior comunicó anteayer a dichos profesionales y que afectará a ex concejales del PP y PSE, empresarios del TAV y periodistas en activo, será tan sólo la punta del iceberg. Y es que el Departamento vasco de Interior parece tener previsto llevar esta iniciativa mucho más allá, y quitar de la circulación a varios centenares de guardaespaldas privados antes de que finalice el año. Según fuentes del sindicato ESAN y de la Asociación de Escoltas vascos, entre el Ministerio y la Consejería podrían retirar a unos 400 escoltas en Euskadi, lo que se dejaría sentir en la totalidad de antiguos cargos socialistas y populares. Algunos portavoces elevaban esa cifra hasta el medio millar.
La Ertzaintza no será ajena a este repliegue y, también este lunes, 60 miembros de la Unidad de Acompañamientos, formada por 200 agentes, dejarán de llevar a cabo labores de vigilancia directa. En su lugar, pasarán a integrar una bolsa de trabajo y a realizar tareas de contravigilancia. Es decir, de controlar el entorno de las personas que dejen de ser protegidas por ertzainas.
Esta medida afectará a una docena de vips -cargos amenazados-, entre los que se encuentran un destacado ex dirigente político que tuvo un papel determinante en un partido vasco, a los miembros de la judicatura vasca que aún no contaban con escoltas privados y a dos viceconsejeros del actual Gabinete López. DNA mantiene en el anonimato su identidad por cuestiones de seguridad. A finales de 2009, Interior ya retiró el acompañamiento de ertzainas a cinco magistrados y a varios altos cargos del Gobierno Vasco, lo que provocó quejas de los protegidos.
El presidente de la Asociación Española de Escoltas (ASES), Vicente de la Cruz, situó ayer el origen de estos movimientos en una reunión mantenida durante el verano entre representantes del Ministerio y la Consejería de Interior, así como mandos de la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Ertzain-tza. "Esto me pone los pelos de punta porque ETA no lo ha dejado", señaló De la Cruz. La Asociación de Escoltas en Activo del País Vasco aseguró a su vez que "el terrorismo de persecución sigue tan activo como siempre" y dijo temer que tras esta forma de actuar se encuentre una futura tregua de ETA.
Al coro de voces críticas se sumaron ayer el parlamentario del PP en la CAV Carlos Urquijo, que expresó su "desacuerdo" con la reducción de escoltas e instó a "no anteponer el presupuesto a la seguridad". El sindicato ESAN calificó la decisión de "arriesgada, con los datos que hay", y vaticinó que se trata de un primer paso para suprimir los acompañamientos de la Ertzaintza.
Riesgos El consejero de Interior, Rodolfo Ares, negó que la reducción de escoltas se deba a un "problema de ahorro" o que tenga que ver con una futura tregua. Explicó que obedece a una "evaluación periódica de los riesgos de las personas", tras lo que "se ha reorganizado el servicio".