El Consejo de Seguridad de la ONU expresó el jueves su gran indignación por la violación masiva de mujeres por parte de grupos armados en el este de República Democrática del Congo. Demandó que se tomen las medidas necesarias para prevenir que se vuelva a producir ataques similares, e instó a todas las partes involucradas en el conflicto del país africano a que pongan fin a la violencia sexual. Y es que el menos 154 mujeres y niñas fueron violadas entre el 30 de julio y el 2 de agosto en trece aldeas.