madrid. El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, cree que el Gobierno ha renunciado a crear un impuesto para gravar las grandes fortunas e "intuye" que optará por subir los impuestos indirectos por su mayor potencia recaudatoria. "Es probable que, en algún momento, el Gobierno haya discutido la conveniencia de elevar la presión fiscal a las rentas más altas, pero creo que ha renunciado a ello, aunque de vez en cuando aparece como globo sonda o para entretenimiento vacacional", subrayó. Toxo afirmó que "casi se creyó" al ministro de Fomento, José Blanco, cuando el año pasado anunció que se iba a abrir un gran debate fiscal y que se subirían los impuestos a las rentas altas. Luego, dijo, la ministra de Economía, Elena Salgado, lo desmintió y este verano se ha repetido la misma pauta, aunque esta vez, "no me lo he creído".
En su lugar, el dirigente sindical cree que el Gobierno va a optar por subir los impuestos indirectos, los especiales, por su mayor potencia recaudatoria y porque "además no gravan directamente las retribuciones de los ciudadanos". Además, otro argumento que podría esgrimir el Ejecutivo para acometer dicha subida es, según Toxo, que existe un diferencial "de cierta importancia" entre la presión fiscal indirecta en España y en Europa. A Toxo no le sorprendería, pues, que se anunciara una subida de este tipo, algo que, a su juicio, "se intuye" a partir de las declaraciones que viene realizando el Gobierno.
Tal impresión viene corroborada por los posicionamientos de los últimos días de la vicepresidenta económica, Elena Salgado, quien el jueves afirmó que crear un impuesto para grandes fortunas no supondría un incremento significativo en los fondos que recauda el Estado, y ayer añadía que el ajuste fiscal que baraja "no afectará a toda la población de manera generalizada y en ningún caso a las clases medias".
La responsable de la política económica del Gobierno argumentaba que los ajustes fiscales sobre las rentas más altas no alcanzarían los objetivos que se buscan ya que España es un país "de una amplia clase media". En todo caso la ministra descartó plasmar por ley nuevos impuestos.
