kabul/ bruselas. La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), que dirige la OTAN, admitió ayer la muerte de entre cuatro y doce civiles durante una operación militar conjunta con fuerzas afganas en el este del país llevada a cabo el pasado mes de julio. Según la información recibida de las autoridades locales y de la provincia de Nangarhar, "parece que entre cuatro y doce civiles murieron durante una operación conjunta", señaló el portavoz de la ISAF, el vicealmrante Greg Smith, en un comunicado.

La operación tuvo lugar en la noche del pasado miércoles en la población de Khwazakheyl, tras recibirse información de que dirigentes de los talibanes se encontraban en un grupo de edificios de la localidad. En el combate murieron entre quince y veinte insurgentes, así como la de dos destacados comandantes talibanes.