vitoria. La nueva campaña en favor del euskera del PP llega a penas un año antes de la cita con las urnas, escueto plazo que siempre dispara las suspicacias sobre el fondo estratégico. Preguntado por si este incipiente impulso a la lengua y los símbolos vascos se mantendrá en caso de que los populares encabecen el gobierno de alguna institución -el Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación Foral de Álava son sus objetivos prioritarios-, Oyarzábal recuerda que "ya lo hicimos cuando nos tocó gestionar las instituciones".

El dirigente vitoriano afirma que con la llegada de su partido al Palacio de la Provincia se mantuvieron intactas las ayudas que el anterior equipo de gobierno fijó, "aunque siempre han insistido, sin poder probarlo, en que no fue así".

La apuesta del PP es para Euskadi. No obstante, la diferente implantación del euskera en cada uno de los territorios también marcará divergencias en la forma de actuar de sus dirigentes. "Los ritmos serán distintos, no cabe duda. No es lo mismo hablar de euskera en Álava, donde la mayor parte de la población mayor de cuarenta años no lo habla, que hacerlo en Gipuzkoa", puntualiza.

Esta diferenciación estratégica ya parece ser una realidad, puesto que es el territorio guipuzcoano donde mayor pujanza tiene el impulso que los populares quieren imprimir a la lengua vasca. Los primeros ejemplos son, el citado apartado guipuzcoano de la web o las cuñas publicitarias en ambos idiomas que contrata el partido conservador en los medios de comunicación de este territorio.