vitoria. La respuesta que ofreció ETA a través de un comunicado a la Declaración de Bruselas sólo dejó satisfecha a la izquierda abertzale ilegalizada. El coordinador de Lokarri, Paul Ríos, se sumó ayer a esta cascada de reacciones y urgió a la organización terrorista a tener en cuenta el emplazamiento rubricado por mediadores internacionales, entre ellos cuatro premios Nobel, ya que de lo contrario ETA provocaría un "daño irreparable" si no diera responde afirmativamente a esta llamada y anuncia un alto el fuego permanente y verificable.

En la declaración a la que dio lectura el mediador Brian Currin, se pide a la banda un alto el fuego supervisado internacionalmente y reclama al Gobierno español que responda con un nuevo proceso de paz si la banda armada da ese paso.

Ríos aseguró que la declaración es "muy importante" porque tiene un contenido "realmente interesante" y el apoyo de personas "muy relevantes" en el ámbito internacional y de la resolución de conflictos.

En este sentido, rechazó las declaraciones que minusvaloran esta declaración, como las del consejero de Interior, Rodolfo Ares, que afirmó que muchos de los impulsores de esta iniciativa son "asesores de Batasuna". A su juicio, estas manifestaciones demuestran "cierta ignorancia respecto a lo que han sido estas personas y lo que pueden hacer".

destinatarios El representante de Lokarri señaló que en esa declaración se han dejado sobre la mesa dos "llamamientos muy claros", uno a ETA y otro al Gobierno central, que espera que sean "atendidos".

Ríos declaró que la respuesta de ETA ha sido "insatisfactoria", en referencia al comunicado emitido por esta organización en vísperas del Aberri Eguna, en el que se reafirmó en su actitud y donde valoró que la desactivación de la respuesta armada no supondría la solución del conflicto.

El representante de Lokarri señaló que su principal "temor" es que se van presentando "diversas oportunidades" para que ETA pueda declarar un alto el fuego y la banda armada "no las está aprovechando". Ríos cree que debería hacer una reflexión sobre esta cuestión y también para dar repuesta a los planteamientos de la nueva estrategia de la izquierda abertzale.

El representante de Lokarri afirmó que ha pasado cierto tiempo desde que se presentó la Declaración de Altsasu y, por lo tanto, la situación tendría que estar "lo suficientemente madura como para que ese paso de ETA pudiese producirse".

Ríos cree que es "muy difícil" que los impulsores de esta iniciativa hayan recibido una "garantía absoluta" de que su llamamiento pudiese obtener una respuesta positiva, pero también consideró que habrán visto "las condiciones necesarias para que ese llamamiento pueda ser atendido por ETA".