barcelona. El secretario general de ERC, Joan Ridao, aseguró ayer que su partido "no acatará" la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut si supone un nuevo "recorte" del texto, aunque CiU y el PSC acaben acatándola, y se mostró convencido de que el independentismo saldrá "reforzado".

Según indicó Ridao, Esquerra no acatará la sentencia porque "no puede aceptar que el texto que ha sido refrendado por el pueblo de Cataluña" sea modificado por "un TC cada día más deslegitimado, que lo está haciendo fatal y que está en una situación de precariedad y de interinidad impresentable".

Ridao recordó, en este sentido, que "un tercio de sus miembros tendría que haber cesado hace más de dos años, otro tercio debería irse este otoño, un miembro murió y no fue sustituido, y otro más fue recusado en una maniobra inicua del PP por haber cometido el grave delito de ser demasiado autonomista".

En consecuencia, recalcó, "esta sentencia no tiene las mínimas condiciones de legitimidad", y aceptarla "sería una ofensa para Cataluña", por lo que ERC insistirá "en la necesidad de que los partidos catalanes decidan una respuesta contundente".

Aunque ERC "ya sabe hace tiempo" qué tipo de respuesta es la que propugna, no quiere avanzarla, "porque los planes b no se explican y sólo se aplican si fallan los planes a", que en este caso pasan por "buscar una reacción unitaria a la sentencia". "La gente nos pide que en algo que es de interés general, y no sólo del Gobierno catalán, nos pongamos todos de acuerdo", ha apuntado, "aunque estemos en un año electoral y esto sea difícil".

Si bien ERC quiere trabajar en esta dirección, Ridao expresó su temor a que CiU y PSC puedan acabar aceptando "el statu quo actual y acaten la sentencia".