Argentina dio ayer un paso más para evitar el inicio de una exploración petrolera británica en Malvinas y anunció la implantación de controles para el tráfico marítimo con las islas, cuya soberanía se disputan ambos países. "Todo buque que se proponga transitar entre puertos ubicados en la Argentina continental y las Malvinas o atravesar aguas jurisdiccionales argentinas a Malvinas, o cargar mercadería entre estos puertos, tendrá que solicitar autorización", señala el decreto firmado por Cristina Fernández.