teherán. Irán cumplió su promesa e inició ayer el proceso de enriquecimiento de uranio al 20% en la planta nuclear de Natanz, en abierto desafío a las potencias de Occidente, que han amenazado con sanciones más severas a la República Islámica. Según el portavoz del organismo iraní de la Energía Atómica, Ali Shirzadian, se trata de una decisión "reversible" ya que la puerta "permanece abierta" para un acuerdo de intercambio de combustible nuclear con Francia y Rusia. "El inicio del enriquecimiento no significa el final de la interacción y la negociación con el organismo de la ONU para alcanzar un acuerdo", aseguró.
Desde Viena, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) confirmó la presencia en Natanz, ubicada en el centro del país, de varios inspectores adscritos a su equipo de expertos.
Una vez iniciado el proceso de enriquecimiento del uranio, el siguiente paso es llevar ese material a las instalaciones atómicas de Isfahán para transformarlo en combustible para el reactor nuclear de investigación de Teherán, que produce isótopos médicos, según señaló el director de la OEAI. Sin embargo desde Occidente y también desde Rusia, se teme que el régimen islámico esté utilizando estos materiales para hacerse con armas atómicas. El ministro de Defensa francés, Hervé Morin, llegó a asegurar el lunes que tienen la "certidumbre" de que es así.
De este tema habló también ayer el presidente de los EEUU, Barack Obama, quien reclamó rapidez a la hora de imponer sanciones a Teherán. "El mundo está unido en torno a la mala conducta de Irán en este área", sentenció.