usurbil. La asociación de familiares de presos, Etxerat, agradeció ayer el amplio apoyo recibido en la manifestación celebrada el pasado 2 de enero en Bilbao -cifró en más de 45.000 personas la particpación- y, aunque consideró un éxito la marcha impulsada por varios partidos abertzales, denunció la prohibición de su convocatoria inicial por parte de la Audiencia Nacional ya que, a su juicio, refleja la "gravedad" de la situación. En este sentido, Etxerat se mostró convencida de que el Estado pretende ilegalizar sus actividades, y frente a esta amenaza, sus representantes se comprometieron a seguir trabajando en defensa de los derechos de sus familiares presos.
"Vamos a tocar todas las puertas que sean necesarias tanto en Euskal Herria, como en el extranjero, y no pararemos hasta conseguir que se respeten los derechos de los presos", aseguraron. En esta nueva fase reivindicativa, enmarcaron también la campaña de protestas que ha comenzado el Colectivo de Presos Políticos Vascos (EPPK, en euskera) y anunciaron que, de cara a 2010, Etxerat seguirá manteniendo contactos con los agentes políticos, sociales y sindicales en busca de "compromisos reales y trabajo en común".
Los miembros de Etxerat Lurdes Zabalegi e Iñigo Alkain fueron los encargados de dar lectura al comunicado que hicieron público en una comparecencia en Usurbil, y en la que estuvieron acompañados por medio centenar de familiares y amigos de presos. Según insistió Alkain, es necesario un cambio en la política penitenciaria, por lo que este año pedirán compromisos "reales y realizables" a los distintos agentes, bajo el mismo lema que utilizaron en la manifestación de Bilbao No a la pena de muerte-No a la cadena perpetua. Dueños de los derechos que les corresponden, presos vascos a Euskal Herria.
En este sentido, consideró que aquella marcha fue la escenificación de "un tsunami solidario" y, tras lamentar la prohibición de la convocatoria inicial, concluyó que la Audiencia Nacional pretendió "hacer invisible la dura realidad" de los presos, 40 de los cuales, denunció, cumplen "cadena perpetua". En definitiva, Etxerat aseguró que frente a las prohibiciones, darán "pasos prácticos y efectivos".