EL nuevo San Mamés se convirtió ayer en el escenario sucesor natural de una vieja reivindicación que, año tras año, viene realizándose y haciéndose pública por estas fechas: la oficialidad de las selecciones deportivas vascas. En este sentido, el partido disputado entre Euskal Selekzioa y el combinado de Perú, más allá de su interés puramente deportivo -que lo tuvo, pese a tratarse de un encuentro amistoso- o de espectáculo futbolístico al uso, significó un escalón más en la larga y tortuosa carrera de obstáculos en que se ha convertido la a todas luces mayoritaria reivindicación social por la oficialidad de Euskadi. Es ya un clamor -no sólo por parte de quienes pudieron disfrutar ayer en directo de esta fiesta deportivo-reivindicativa, sino de la gran mayoría en Euskadi- la exigencia de que los deportistas y selecciones vascas puedan disputar competiciones internacionales de igual a igual con otros países en las distintas modalidades. Solo el bloqueo político por intereses ideológicos y de carácter identitario por parte del Estado español está privando a los ciudadanos vascos de ese anhelo, por mucho que se argumente una imposibilidad reglamentaria de los estamentos internacionales. Porque, con todo, las selecciones vascas están compitiendo y representando a Euskadi por el mundo en diferentes disciplinas deportivas. A lo largo del año 2013 que ya toca a su fin, han sido trece los eventos en los que nuestro país ha tomado parte en el ámbito internacional en promoción, colaboración o subvención de la Unión de Federaciones Deportivas vascas. Es más, una de esas selecciones -la de kayak-surf- se ha proclamado campeona del mundo con caracter oficial. Otro hito en este terreno ha sido el primer partido fuera del Estado español de la selección vasca femenina de baloncesto. Son pequeños grandes pasos que, como el partido de ayer entre Euskal Selekzioa y Perú -felizmente desarrollado sin los vergonzosos incidentes que tuvieron lugar el año pasado y que ensombrecieron la reivindicación ante el mundo-, forman parte de un largo camino por recorrer. En este sentido, cabe explorar todos los caminos posibles, desde la diplomacia a una mayor visibilización de nuestras selecciones, aunque el fundamental sigue siendo el de derribar el muro de la nula voluntad política del Estado español.
- Multimedia
- Servicios
- Participación