Confieso que entiendo al consejero de Sanidad y a otros responsables políticos cuando expresan su preocupación por que vaya a llegar un momento en el que las cargas financieras van a hacer insostenibles los servicios sanitarios y sociales y entiendo el debate sobre los sistemas de copago que han aplicado otros Estados del Bienestar más desarrollados. Pero la respuesta de Bengoa a este debate es la improvisación suprimiendo servicios o recortando médicos y ambulatorios. Eso es ir dando palos de ciego.