Durante seis meses –entre abril y octubre del año 27 de nuestra era– Jesús, que es el protagonista central de esta popular saga literaria, se vio obligado a huir para no ser capturado por el Sanedrín. Y huyó sin cesar. Belén es el libro que descubre por qué Jesús no pudo ser un esenio y ofrece un repaso por las principales sectas judías (los esenios son una de ellas): fariseos, saduceos, escribas, cenotas, nazirs... El famoso escritor pamplonés, conocido por sus trabajos de ufología, se ha pasado más de la mitad de su vida en las carreteras y en aviones persiguiendo sueños. Y de vez en cuando escribe. Con Caballo de Troya 12. Belén ha puesto punto y final a la saga que tantos éxitos literarios le ha proporcionado. Aunque sigue investigando, no tiene en mente abordar un nuevo proyecto. Tras el fallecimiento de su esposa, Blanca, en enero de 2021, el periodista navarro reconoce que no se siente todavía con fuerzas para ponerse delante de un folio en blanco. Se tiene que recuperar anímicamente de la pérdida de la mujer que durante 39 años le acompañó en sus investigaciones, en sus viajes, en todo. Y entonces es más que probable que vuelva, porque no ha dejado de indagar en los asuntos que más le interesan.

PERSONAL

Nacimiento: Pamplona, 7 de septiembre de 1946 (76 años).

Formación: Estudió Periodismo en la Universidad de Navarra. Sus primeros pasos en la profesión fueron en La Verdad de Murcia, de donde pasó a El Heraldo de Aragón. Recorrió el mundo como enviado especial y fue periodista en varios diarios del Estado. Luego se trasladó a la capital vizcaína, donde continuó como periodista para La Gaceta del Norte. 

Investigaciones: A partir de 1974 se especializa en el tema ovni y cubre todas las noticias relacionadas con esta materia para su periódico, destacando las primeras sobre la Fuerza Aérea Española. En 1975 realiza investigaciones sobre el sudario de Turín, hecho que marcó su vida al dar origen a la serie de novelas Caballo de Troya, sobre la visión de Benítez acerca de la vida de Jesús de Nazaret. En 1976 recibió de mano del Teniente General Felipe Galarza, Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire Español, doce expedientes ovni clasificados que Benítez publicaría íntegramente en su libro Ovnis: Documentos Oficiales del Gobierno Español (que posteriormente se reeditaría con el título Ovni: alto secreto). Esta fue la primera desclasificación de archivos ovni en España después de que este asunto fuera declarado en diciembre de 1968 como Materia Reservada. En 1979 dejó el periodismo activo.

Publicaciones: De sus investigaciones tiene 64 libros, algunos de ellos inéditos. Caballo de Troya 12. Belén (Planeta) es el ultimo de la saga, cuyo primer volumen se publicó en 1984. Es Premio Periodistas de Navarra otorgado en 2021 por la Asociación profesional de esta comunidad.

Usted es periodista, cuando empezó le tachaban casi de loco y ahora es reclamado en programas y tertulias. 

Lo encuentro hasta cierto punto natural. Al principio ninguna idea es aceptada. Con el paso del tiempo cuando se dan cuenta de que estás haciendo un trabajo serio y exhaustivo la gente acepta lo que realizas, lo que investigas; pero es un proceso natural. Inicialmente, ninguna idea nueva es aceptada.

Mirando hacia atrás su trayectoria vital. ¿Cómo valora el haber dejado el periodismo para apostar por la investigación?

Al principio me costó mucho trabajo porque tuve que abandonar el periódico, el puesto de trabajo, el sueldo, en contra de todo el mundo, incluida mi familia. Pero yo entendía que la investigación era lo más importante, que lo que estaba investigando era un fenómeno real y decidí dejarlo todo por llevar a cabo mis sueños.

¿Fue muy difícil?

Sí. Tenía cuatro hijos pequeños, no contaba con recursos económicos y tuve que optar por el periódico, un puesto de trabajo con sueldo, o por la aventura de la investigación. Y me decanté por la aventura.

A pesar de que hay una mayor visibilidad, existen aún muchas reticencias a aceptar la existencia de extraterrestres. ¿Por qué cree que es: por miedo, incertidumbre, desconocimiento?

Yo creo que es un poco por todo: primero, por puro desconocimiento, por la ignorancia, la falta de información, el miedo y los intereses creados.

¿Qué intereses?

Hay sectores de las religiones en general, de todas, a los que no les interesa plantearse la posibilidad de que haya civilizaciones que no son humanas y que están más avanzadas que nosotros y pueden demostrar que la existencia de Dios es real, pero que las religiones no son necesarias. Eso significa oponerse al tema frontalmente.

El periodista y escritor J.J. Benítez ha cumplido 76 años.

El periodista y escritor J.J. Benítez ha cumplido 76 años.

Estas dudas, incluso entre los ufólogos con éxito, ¿se producen todavía? 

Si dudan, recalco, es por falta de información. La persona que tiene datos sobre el tema ovni, o sobre cualquier otra cuestión, está más capacitada para saber de qué está hablando.

Entonces, ¿nos faltan datos suficientes sobre el tema?

La información que sale en los medios no es completa ni veraz, porque hay intereses religiosos, pero sobre todo militares, para que eso no vea la luz, pero los investigadores sabemos que es verdad. Yo llevo 50 años en la investigación y no tendría ningún sentido que siguiera investigando si no tuviera la certeza de que eso es verdad. 

¿Ha tenido problemas al hacer sus averiguaciones?

Sí, sí, muchos problemas de todo tipo, de desprestigio profesional e incluso un atentado. En 2001 hubo lo que se llama una inoculación conocida como Chlamydia pneumoniae,​ que provoca un engrosamiento de las arterias y posteriormente un infarto. Aparentemente te mueres de un infarto, pero yo no. Me salvé por casualidad.

¿Y todo provocado por quienes no quieren que se conozcan sus investigaciones?

Exacto.

Pues las dudas sobre sus investigaciones contrastan con el éxito de sus libros...

Porque la gente que tiene esas dudas carece de información, pero las personas bien informadas, al poco tiempo dejan de tenerlas. Tienen otras, pero saben que ese tipo de fenómenos son reales.

Con las nuevas tecnologías da la impresión de que la gente tiene más información...

Bueno, a veces no es que esté mal informada, es que está intoxicada.

En las redes, ¿cómo se trata el tema de los extraterrestres?

No tengo ni idea porque yo no las uso. Ni idea, pero tampoco me interesa. Paso de ellas; no tengo ni internet y mi teléfono móvil es de la época de la prehistoria. Yo prefiero hablar con las personas que hablar con el móvil.

La gente que lee sus publicaciones, ¿cree que las interpreta como novelas fantásticas?

Eso es lo de menos. No son ficción, pero si la gente quiere pensar que lo son me parece muy bien. Lo importante en los libros de Caballos de Troya es que el mensaje llegue al corazón de las personas. Eso es lo importante. Lo mágico es que quede algo de positivo de mis lecturas.

Con la edad, la ilusión sobre las cosas suele decaer. Sin embargo, usted sigue investigando.

Sí, y en la medida de lo posible continuaré, porque me queda mucho por aprender y sigo publicando todo aquello que encuentro.

"Quien no cree en los extraterrestres es por puro desconocimiento”

¿Son muchos los investigadores como usted?

Ya no quedan casi. En España tres o cuatro y en el mundo por el estilo; muy pocos.

¿Por qué?

Porque la gente está en otras guerras, está luchando en otros frentes y no tiene tanto interés por este asunto. Y pienso que será el suceso más importante de la historia. 

Augura que para el 2027 puede caer un meteorito. ¿Qué fuentes tiene?

No son fuentes, tengo información contrastada. Pero de verdad, ojalá me equivoque y ese meteorito no caiga.

¿Qué credibilidad tienen sus predicciones? ¿Se podría hacer algo para evitarlo?

Estimo que un 60% de credibilidad. Supongo que sí se podría hacer algo, sería cuestión de desviar o destruir ese meteorito, por ejemplo, con armas nucleares o enviando misiles. Es curioso que hace unas semanas la NASA mandase una sonda para que se estrellara contra uno de estos meteoritos. ¡Qué casualidad! Pero suponiendo que sea verdad, no sé si lo harán.

De confirmarse sus augurios el caos y el desastre serían tremendos.

Podría haber 1.500 millones de muertos en dos días, una oscuridad de nueve años, nos quedaríamos sin policía, sin agricultura, sin ganadería, con bajadas de temperaturas de hasta 20 grados bajo cero y con una erupción volcánica que cubriría la Tierra. No podemos hacernos ni idea de lo que se nos vendría encima. Pero lo dicho, ojalá me equivoque y no llegue a producirse.

Tras estas afirmaciones, ¿no se han puesto en contacto con usted desde organismos gubernamentales?

No sé si ellos lo saben o no. Da igual, pero insisto en que ojalá no tenga razón.

¿Con este último libro que ha publicado acaba la saga del Caballo de Troya?

Sí. Espero que sí. Sobre la vida de Jesús está prácticamente todo contado; son unas 7.000 páginas y queda una parte anterior a la vida de predicación que no sé si la llegaré a publicar

¿Por cansancio?

Porque todavía no estoy con ánimo para publicar nada. Falleció mi esposa, estoy en una situación anímica complicada y no me quiero plantear ahora prácticamente nada.

Es difícil imaginarle a usted quieto, sin investigar.

Sigo haciéndolo, pero digamos que necesito un tiempo para recuperarme anímicamente.

¿Jesús era un extraterrestre? 

No. Jesús nació en Belén, pero desde el punto de vista de su naturaleza divina, por supuesto que es un extraterrestre; era el gran extraterrestre.

¿Qué le gustaría conseguir con sus libros?

Abrir las mentes de las personas. Con eso es suficiente. 

¿Que cree que pasaría si estos extraterrestres se hicieran palpables entre los humanos? ¿Cómo piensa que sería la relación?

Yo no creo que eso se vaya a producir en un plazo mediano, porque sería contraproducente para nosotros. De hecho, no se ha producido un contacto oficial, aunque sí muchos esporádicos. Si eso tuviera lugar, la humanidad tendría un gravísimo problema, el mismo que tuvieron los aztecas cuando llegaron los españoles.

¿Por qué empezó en esta aventura de la investigación?

Creo que todos los seres humanos tienen su vida escrita perfecta y minuciosamente, lo que ocurre es que no lo sabemos. Y en mi caso, yo aparentemente me quería dedica a la pintura, pero mi padre no tenía recursos económicos para llevarme a la escuela de Bellas Artes de Madrid y entré en el mundo del periodismo sin saber muy bien lo que era. Y poco a poco me di cuenta en qué consistía. Por eso pienso que cada ser humano tiene su destino perfectamente estructurado, aunque no lo sepa.

¿Pero lo puede cambiar?

No lo creo. No.

¿Está satisfecho con la línea de trabajo por la que apostó hace 50 años?

Sí. Entiendo que he cumplido buena parte de mi contrato. Lo he hecho lo mejor que he podido y seguiré peleando en la medida que me corresponda, como todos los seres humanos. Cada persona tiene su trabajo, tiene su vida y pienso que está perfectamente estructurada desde el principio. Lo que ocurre es que para no descafeinar esa aventura no la sabemos.