El Ejército israelí confirmó este domingo haber recuperado los cadáveres de seis rehenes de un túnel subterráneo en el área de Rafah, sur de la Franja de Gaza, y confirmó su retorno a territorio israelí.

Los fallecidos, todos tomados como rehenes el pasado 7 de octubre durante el ataque de Hamás, han sido identificados como Carmel Gat, Eden Yerushalmi, el estadounidense-israelí Hersh Goldberg-Polin, Alexander Lobanov, Almog Sarusi y Ori Danino.

El portavoz castrense, Daniel Hagari, dijo esta mañana que los seis rehenes habrían sido asesinados por Hamás poco antes de que las fuerzas llegaran hasta ellos, según una investigación inicial. Sus cuerpos fueron localizados a alrededor de un kilómetro de donde el rehén beduino, Kaid Farhan al Qadi, fue hallado con vida la semana pasada, dijo Hagari.

Ayer, sobre las once de la noche, el Ejército ya confirmó haber hallado "varios cadáveres durante los combates" en Gaza y aseguró que "los efectivos continúan operando en la zona y realizando un proceso de extracción e identificación".

Solo ahora se ha hecho público que los cuerpos encontrados pertenecen a cuatro hombres y dos mujeres, lo que reduce a 97 el número de personas que siguen cautivas, de los 251 secuestrados el 7 de octubre. De ellos, al menos 33 están confirmados muertos.

"Desde hace más de dos meses está sobre la mesa un acuerdo para el regreso de los rehenes. Si no fuera por los retrasos, el sabotaje y las excusas, aquellos cuyas muertes supimos esta mañana probablemente todavía estarían vivos", reaccionó a esta noticia el Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas, que anunció manifestaciones este domingo en Jerusalén y Tel Aviv.

Entre los fallecidos, muchos veinteañeros, se encuentra el estadounidense-israelí Hersh Goldberg-Polin, de 24 años y nacido en California, cuya familia confirmó en un mensaje en Facebook su muerte. El presidente de EEUU, Joe Biden, envió sus condolencias en un comunicado.

El 7 de octubre, Hersh asistió al festival de música NOVA, donde fue raptado y herido, se vio obligado a realizar un torniquete y sufrió la amputación de una de sus manos, como se observa en videos del ataque.

Hace tan solo cuatro meses, en un video propagandístico publicado por Hamás el 24 de abril, Hersh fue visto en buen estado de salud, leyendo a cámara un mensaje dirigido al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, por no hacer suficiente para liberar a los rehenes.

Su familia es, además, una de las más activas en la lucha por el retorno de los cautivos. En noviembre, su madre, Rachel, fue uno de los 12 familiares que se reunieron con el papa Francisco en el Vaticano, y los dos progenitores siempre han sido muy explícitos con la urgencia de alcanzar un acuerdo de tregua.

"Hersh, trabajamos día y noche y nunca pararemos", reiteró Rachel Goldberg-Polin el pasado 29 de agosto, cuando un convoy con familiares de los rehenes se desplazó a la línea divisoria de Gaza para pedir la liberación de sus seres queridos.

Críticas a Netanyahu

El foro de familias de rehenes ha denunciado que los secuestrados cuyos cuerpos han sido recuperados este domingo por el Ejército israelí, estarían vivos "si no fuera por la locura, las excusas y las vueltas" del Gobierno de Benjamin Netanyahu.

"Hace más de dos meses que está sobre la mesa un acuerdo para devolver a los rehenes. Si no fuera por la locura, las excusas y las vueltas, los secuestrados de cuyas muertes nos hemos enterado esta mañana probablemente estarían vivos", ha declarado el Foro de Familias de Secuestrados y Desaparecidos en su cuenta de la red social X.

En el mismo mensaje, el grupo de familiares de israelíes secuestrados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha afeado al gabinete de Netanyahu que, "durante once meses, no hizo lo que se espera de un gobierno: traer a sus hijos e hijas a casa".

En este sentido, ha apelado directamente al primer ministro. "Netanyahu: Basta de excusas. Basta de giros. Basta de abandono. (...). Ha llegado el momento de traer a casa a nuestros secuestrados: los vivos para rehabilitarlos y los muertos y asesinados para enterrarlos en su país".

El foro ha llamado a la población a que "se prepare" para manifestarse este domingo en respuesta al hallazgo de los cadáveres y para protestar por el "abandono de los rehenes" por parte del Gobierno. "Netanyahu abandonó a los rehenes. Ahora es un hecho. A partir de mañana, el país temblará (...). El país se paralizará. Se acabó el abandono", ha comunicado en la mencionada plataforma.  

El presidente israelí pide perdón

Mientras, el presidente de Israel, Isaac Herzog, pidió este domingo disculpas "en nombre del Estado de Israel" a las familias de los seis rehenes muertos.

"En nombre del Estado de Israel, abrazo a sus familias con todo mi corazón y me disculpo por no poder traerlos a casa sanos y salvos", dijo hoy Herzog en un comunicado, adelantándose al primer ministro, Benjamín Netanyahu, que aún no ha enviado sus condolencias.

Herzog prometió seguir luchando "sin descanso" contra Hamás y recordó que existe un "pacto supremo" entre el Estado y sus ciudadanos que debería garantizar su seguridad.

"Tenemos la misión sagrada y urgente de traerlos a casa", urgió el líder, en referencia a los 97 rehenes que siguen en Gaza, de los que se cree que al menos 33 ya están muertos.

Mueren tres israelíes en un ataque a tiros en Cisjordania

Por otra parte, tres israelíes han muerto este domingo en la gobernación cisjordana de Hebrón durante un ataque a tiros contra su vehículo efectuado por los pasajeros de otro coche a la altura de la localidad de Tarqumia en un incidente que el Ejército atribuye a "terroristas palestinos".

El ataque ha tenido lugar en la ruta 35 de la gobernación y los atacantes se han dado a la fuga, han informado los militares en un mensaje publicado en su cuenta de la red social X.

Los fallecidos, según fuentes de Emergencias, son dos hombres de unos 30 y 50 años y una mujer de unos treinta años. Dos de ellos fallecieron en el acto. El tercero, el hombre de 50 años, sucumbió a sus heridas durante su traslado al hospital.

El Ejército de Israel ha emprendido una operación de busca y captura por toda la gobernación, escenario en los últimos días de una ofensiva militar israelí a gran escala en paralelo a la campaña de bombardeos e incursiones que está llevando a cabo en la Franja de Gaza.