Carlos III del Reino Unido anunció este miércoles la agenda legislativa del Gobierno laborista de Keir Starmer al inaugurar con el llamado Discurso del Rey la actividad del nuevo Parlamento surgido de las elecciones del 4 de julio.

El monarca, acompañado de su esposa, Camila, enunció desde su trono en la Cámara de los Lores (alta, no electa), como marca la tradición, más de 35 proyectos de ley que el Ejecutivo prevé aprobar en los próximos meses, con el objetivo central de fomentar el crecimiento económico.

Al iniciar su intervención -que escribe el Gobierno-, el soberano dijo que éste "gobernará en servicio del país", con un programa "centrado en varias misiones fundamentadas en los principios de seguridad, justicia y oportunidades para todos".

Fue la segunda vez que Carlos III, de 75 años, abrió el periodo de sesiones parlamentarias desde que asumió la Corona el 8 de septiembre de 2022 y la primera con un Ejecutivo del Partido Laborista, que ganó los últimos comicios por mayoría absoluta tras 14 años de mandato conservador.

Renacionalización del ferrocarril

El monarca confirmó que el Gobierno legislará para traspasar los servicios ferroviarios a propiedad pública una vez que expiren los contratos con los operadores o si estos no cumplen con sus compromisos.

Para reforzar esta gestión estatal, destinada a solventar la fragmentación de la red desde su privatización en los años 90, se creará la entidad Great British Railway, que velará por ofrecer un mejor servicio a los pasajeros.

Carlos III indicó que se pondrá en marcha un fondo nacional de riqueza para atraer la inversión privada en infraestructuras así como la entidad Great British Energy para coordinar la transición a la energía limpia para 2035.

Se aprobará una ley de reforma de la planificación urbanística a fin de acelerar la construcción de vivienda y se modificarán las normas de los alquileres para prohibir los desahucios injustificados, enumeró.

El Ejecutivo introducirá asimismo una ley para mejorar los autobuses en las regiones así como la de Devolución (descentralización) inglesa, que transferirá poderes a los ayuntamientos para impulsar la economía local.

Rigor fiscal y mejoras laborales

En su mensaje a los lores y a los diputados de la Cámara de los Comunes (baja), el rey adelantó que el nuevo Gobierno someterá todos los presupuestos a la supervisión de la Oficina de responsabilidad presupuestaria (OBR, en inglés) a fin de garantizar el equilibrio de las finanzas públicas.

Junto con una nueva estrategia industrial, se aprobarán medidas para mejorar las condiciones de los trabajadores y "prohibir prácticas de explotación".

Se prevé además la formación de una unidad de seguridad de fronteras que combata el tráfico de inmigrantes, después de que el Gobierno de Starmer anulara el anterior plan conservador de enviar a los indocumentados a Ruanda.

El monarca anunció la constitución de un regulador independiente para el fútbol y la inteligencia artificial, mientras que se reformará la Cámara de los Lores para eliminar a los pares hereditarios y modernizarla.

Tras la intervención del jefe del Estado, los diputados de la Cámara de los Comunes (baja, electa) mantendrán un debate de varios días que culminará en una votación simbólica.

Después de la primera sesión de control al nuevo Ejecutivo el próximo miércoles, en la que Starmer debutará como primer ministro, se espera que el Parlamento sea disuelto al día siguiente para el receso de verano, hasta septiembre.