La ciudad de Nueva York ha acordado el pago de una indemnización de 13,7 millones de dólares a un millar de manifestantes por las tácticas ilegales empleadas por la Policía durante la represión de las protestas antirracistas que estallaron en la ciudad en mayo y junio de 2020.

En concreto, la Alcaldía pagará 9.950 dólares a cada una de las 1.380 personas que presentaron una demanda colectiva contra el cuerpo de seguridad de la Policía al que denunciaron por violar sus derechos constitucionales.

Según el documento judicial que recoge el acuerdo del pago de la indemnización, la Alcaldía niega "toda responsabilidad y niega también haber tenido o tener una política, o haber participado o participar actualmente en algún patrón o práctica que haya privado a las personas de sus derechos, privilegios o inmunidades garantizadas o protegidas por la Constitución y las leyes de los Estados Unidos y el Estado de Nueva York".

Los demandantes denunciaron a la Policía de Nueva York por haberles causado heridas, estrés emocional y pérdida de libertad, además de por haberse excedido en el tiempo de detención, el uso de excesivo de la fuerza y la negación a atención médica, entre otras acusaciones.

En concreto, la denuncia hace referencia a las detenciones practicadas por la policía entre el 28 de mayo y el 4 de junio de 2020 en distintas zonas de la ciudad.

El pasado marzo, la ciudad de Nueva York ya aceptó pagar 21.500 dólares a cada una de los 320 manifestantes que fueron acorralados, y en muchos casos golpeados o rociados con gas lacrimógeno, antes de ser detenidos por la Policía durante una protesta en 2020 a raíz del asesinato del afroamericano George Floyd a manos de un agente.

Esta última protesta tuvo lugar en el distrito neoyorquino de El Bronx en junio de 2020, en el momento álgido de las masivas manifestaciones contra el racismo y la violencia policial que se vivieron por todo Estados Unidos después de la muerte de Floyd.

Floyd perdió la vida en Minneapolis (Minnesota), asfixiado después de que un agente presionara la rodilla contra su cuello durante más de nueve minutos al intentar detenerlo por haber utilizado un billete falso para pagar en una tienda.

En Nueva York, las protestas desembocaron en algunos casos en saqueos y destrucción de propiedades que llevaron a las autoridades a decretar un toque de queda nocturno y que resultaron en duras cargas policiales en varias ocasiones, incluidas contra manifestantes pacíficos.