Al menos ocho personas han muerto y catorce han resultado heridas, de las que siete están en estado crítico, tras un tiroteo sucedido en la noche de este jueves en la localidad serbia de Mladenovac, a unos 60 kilómetros de Belgrado, informa la agencia de noticias serbia Tanjug.

Detenido el atacante

Las fuerzas de seguridad han detenido a primera hora de este viernes al hombre sospechoso de matar a tiros a ocho personas en la localidad de Dubona, situada al sur de la capital, Belgrado, según ha confirmado el Ministerio del Interior serbio.

El ministerio ha señalado en un comunicado que el sospechoso, identificado por sus iniciales, U. B., ha sido detenido en los alrededores de Kragujevac "tras una extensa búsqueda".

"Es sospechoso de matar a ocho personas y herir a catorce con un arma de fuego. La Policía continúa su trabajo a la hora de esclarecer todos los hechos y circunstancias en torno a este suceso", ha zanjado en su comunicado.

Acto terrorista

Por su parte, el actual ministro de Interior serbio, Bratislav Gasic, también ha viajado a la zona y ha declarado que el suceso es "un acto terrorista". Durante las operaciones de búsqueda y captura, las fuerzas de seguridad cortaron las carreteras de acceso a ambos pueblos, mientras que fue desplegado un helicóptero para ayudar en las tareas.

El Gobierno de Serbia había anunciado horas antes del incidente la suspensión de la emisión de nuevas licencias de armas durante dos años y acordó inspecciones más estrictas a sus propietarios, a raíz de un ataque armado ejecutado el miércoles por un estudiante en un colegio de Belgrado.

Tras una discusión

Según la prensa local, este segundo tiroteo masivo en Serbia habría tenido lugar como consecuencia de una discusión que el atacante tuvo con un policía y su hermana. Tras este episodio fue a su casa para coger un arma y volvió al lugar de la disputa disparando desde su vehículo en marcha contra las personas con las que mantuvo la discusión para después seguir disparando de forma indiscriminada contra otras personas que se encontraba a su paso.

El tiroteo se produce dos días después de otro acaecido en Belgrado en el que un joven mató a ocho estudiantes y a un guardia de seguridad en un colegio de enseñanza primaria. El suceso se saldó con al menos nueve muertos, convirtiéndose así el tiroteo más mortífero en el país europeo en los últimos años.

El jefe de la Policía, Veselin Milic, explicó que el sospechoso, en este caso un menor de 13 años, llamó a las autoridades para avisar de la masacre en la Escuela Primaria Vladislav Ribnikar del barrio de Vracar. El autor del ataque, detenido tras el suceso, llevaba un mes planeándolo e incluso dispuso en una lista quiénes serían sus objetivos.