Los enfrentamientos entre el Ejército de Sudán y el poderoso grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) continúan en la capital sudanesa, Jartum, a pesar de la entrada en vigor esta tarde de una nueva tregua de 24 horas que las partes beligerantes se comprometieron a respetar, informaron testigos a EFE.

Testigos consultados aseguraron que los combates continuaron en las inmediaciones del Palacio Republicano y del cuartel general del Ejército, ambos los puntos más calientes de la capital, una hora después de la entrada en vigor del nuevo armisticio a las 18.00 hora local (16.00 GMT).

"Afirmamos nuestro compromiso con el alto el fuego integral y esperamos que la otra parte cumpla con la tregua según las fechas anunciadas", indicaron los paramilitares en Twitter tras anunciar su adhesión al cese de hostilidades.

Por su parte, el Ejército dijo que esta tregua tiene el objetivo de "facilitar los aspectos humanitarios, bajo la condición de que la otra parte se comprometa con las obligaciones de la tregua".

Por segundo día consecutivo, los dos bandos enfrentados han violado una tregua de 24 horas.

El armisticio de ayer -propuesto por Estados Unidos- tampoco fue respetado por las partes en ningún momento, y los combates continuaron con la misma intensidad en Jartum y otras ciudades del país.

Hasta ahora, las partes solo han cumplido parcialmente unas breves "pausas humanitarias" de tres horas (entre el domingo y el lunes) que permitieron la apertura de corredores humanitarios para que los civiles atrapados pudieran evacuar o ir en busca de suministros, que cada vez son más escasos debido a los enfrentamientos.

Los combates prosiguieron hoy en Sudán entre las FAR y el Ejército por quinto día consecutivo, un conflicto que ha segado ya más de 270 vidas civiles y ha dejado miles de heridos, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud.