- Rusia ha rechazado todas las propuestas para evacuar a los soldados ucranianos y a los civiles que permanecen sitiados en la ciudad portuaria de Mariúpol, afirmó ayer un asesor del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. El citado asesor, Mijailo Podolyak, declaró que a petición del presidente varios “líderes mundiales” se han dirigido al Kremlin para solicitar la creación de un corredor humanitario desde Mariúpol, donde todavía prosiguen los combates en las inmediaciones de la acería Azovstal.

“Por desgracia, no hay respuesta de la parte rusa”, dijo Podolyak en una entrevista con Radio Europa Libre en la que conjeturó que Moscú persigue el objetivo “simbólico” de destruir la ciudad, controlada ya en su mayor parte por el Ejército ruso, y a quienes la defienden, en referencia al Regimiento Azov. “Todos los días hay ataques con artillería pesada y cazas para destruir Azovstal. Los rusos saben que hay niños en el interior, pero siguen bombardeando”, denunció.

En la planta metalúrgica de Azovstal se encuentra atrincherado medio millar de combatientes y unos mil civiles, según fuentes ucranianas, de los cuales unos 500 están heridos sin posibilidad de recibir tratamiento médico. Las reservas de alimentos y de agua llegarán a su fin en los próximos días, según fuentes del ultraderechista Regimiento Azov, integrado en el Ejército ucraniano. Moscú ha excluido la posibilidad de lanzar un asalto contra la acería para evitar bajas rusas, optando por el contrario por sitiar la planta e impedir el acceso de ayuda humanitaria a los asediados. Este jueves, el secretario general de la ONU, António Guterres, afirmó en una rueda de prensa con Zelenski en Kiev que Naciones Unidas está haciendo “todo lo posible” para evacuar a los civiles de la planta. Zelenski por su parte aseguró que Ucrania está “abierta a mantener negociaciones inmediatas” para lograr un corredor humanitario que permita poner a salvo a quienes permanecen en Azovstal.

Por su parte, unos 25 civiles han abandonado el territorio de Azovstal, en la ciudad portuaria de Mariúpol, informaron las agencias oficiales rusas TASS y RIA Nóvosti. Entre los que han logrado abandonar la fábrica metalúrgica se encuentran 19 adultos y seis niños menores de 14 años, afirman.

En la planta de Azovstal hay unos mil civiles refugiados junto a unos 2.000 soldados ucranianos que aún resisten a los bombardeos rusos. Entre las personas que se esconden de los bombardeos en la planta hay unos 500 heridos. Rusia ha dado por “liberada” la ciudad a orillas del mar de Azov y ha empezado a enviar tropas desde Mariúpol hacia el Donbás, de acuerdo con el Estado Mayor General de Ucrania y el Pentágono.