El director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, viajará el martes 26 de abril a la antigua central nuclear ucraniana de Chernóbil como parte de una misión técnica para ayudar a prevenir accidentes nucleares debido a la guerra causada por la invasión rusa.
Un equipo del departamento de seguridad nuclear y salvaguardias del OIEA entregará equipos y realizará mediciones radiológicas en las instalaciones, que sufrieron algunos daños durante las cinco semanas que estuvieron ocupadas por tropas rusas, hasta que se retiraron el 31 de marzo.
"La presencia del OIEA en Chernóbil será de suma importancia para nuestras actividades de apoyo a Ucrania en su intento de restablecer el control reglamentario de la central y garantizar su funcionamiento seguro", ha asegurado Grossi en un comunicado. Además, se realizarán mediciones para determinar la situación radiológica en la zona, después de que Ucrania informase de la subida de los niveles de radiación, probablemente debido a que el terreno contaminado por el accidente de 1986 fue removido por el paso de blindados y otros vehículos pesados.
El diplomático argentino ha adelantado que el OIEA lanzará en las próximas semanas misiones de asistencia en otras instalaciones nucleares ucranianas. Grossi ya estuvo el pasado 30 de marzo en la Central Nuclear Ucrania Sur para lanzar una iniciativa de asistencia del OIEA para reducir el riesgo de accidentes que "podría tener graves consecuencias tanto para la salud humana como para el medio ambiente, en Ucrania y fuera de ella."
El OIEA y Grossi han alertado desde el comienzo de la invasión rusa a Ucrania del riesgo de accidentes y de la necesidad de aplicar una serie de protocolos para garantizar la seguridad de las instalaciones nucleares ucraniana.