Rusia ha declarado este lunes la alerta terrorista en el norte de la península de Crimea y en otras cuatro regiones del sur del país, tres de ellas limítrofes con Ucrania, escenario de una campaña militar rusa desde el 24 de febrero. El nivel "amarillo" de alerta ha entrado en vigor a las 20.00 de la tarde del lunes y estará vigente durante dos semanas, según informan las autoridades locales.
En el caso de las regiones de Bélgorod, Kursk y Voronezh, regiones vecinas con Ucrania que han acogido numerosos refugiados, la alerta afectará a todo el territorio. El líder crimeo, Serguéi Axiónov, explica que la alerta se aplicará al norte de la anexionada península ucraniana, que limita con la región ucraniana de Jersón, controlada por el Ejército ruso. Durante ese tiempo las fuerzas de seguridad y los servicios secretos intensificarán sus patrullas, mientras se recomienda a la población que sea "más cauta" y que informe a la policía sobre la mínima sospecha. Los ciudadanos deben llevar siempre consigo documentos de identidad y mostrarse comprensivos con la labor de las fuerzas del orden.
El líder prorruso de Donetsk, Denís Pushilin, ha anunciado la intensificación de la "operación de liberación" del Donbás, al tiempo que ha confirmado que sus milicias tomaron el lunes el puerto de Mariúpol, en el mar de Azov. Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, asegura que su país se está preparando para la ofensiva final del enemigo en el este del país, por lo que urge a los países occidentales a suministrar armamento a Kiev lo antes posible.