- El derecho a veto de Rusia como miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas impidió una resolución en su contra de la ONU por el ataque e invasión de Ucrania. Varios países se habían unido para copatrocinar juntos la resolución presentada oficialmente por Estados Unidos y Albania ante el Consejo de Seguridad de la ONU,

El llamamiento a copatrocinar el texto partió de Suecia, y a él se habían sumado España, Alemania, Italia, Polonia, Noruega, Lituania, Letonia, Estonia, Luxemburgo y Nueva Zelanda. Otros países con asiento en el Consejo de Seguridad como Francia, Reino Unido e Irlanda mostraron también su apoyo inequívoco. De todos modos, estaba claro que la iniciativa no tenía ningún viso de prosperar por el veto de Rusia como miembro permanente del Consejo.

La ministra británica de Exteriores, Liz Truss, conversó hoy con su homólogo chino Wang Yi y acto seguido tuiteó que “esperamos que China defienda la soberanía y la integridad territorial de Ucrania”, pero hasta el momento el gobierno chino no se ha distanciado de Rusia, ni siquiera tras el lanzamiento de la invasión del territorio ucraniano.

En cuando a la actitud de India, reticente hasta ahora a criticar a Rusia, el ministro ucraniano de Exteriores Dmitro Kuleba informó en Twitter de que llamó a su homólogo indio Subrahmanyan Jaishankar para pedirle “usar toda su influencia en sus relaciones con Rusia para forzarla a cesar su agresión a Ucrania y para apoyar la resolución” en el Consejo.

Un alto representante del Gobierno estadounidense dijo el pasado jueves, que la resolución, aunque se daba por hecho su rechazo en la votación, iba a obligar a cada país a tomar una posición clara en estas circunstancias, y se mostró convencido de que el resultado final mostrará el aislamiento de Rusia.

El representante aludía a las declaraciones de los pasados días de numerosos países que pedían apostar por las vías diplomáticas y respetar la integridad territorial, aunque sin por ello criticar a Rusia, dando por hecho que eso se traduciría en un voto contra Moscú.

Por su parte, el representante chino ante las Naciones Unidas -otro de los países que también tiene derecho a veto en las resoluciones del Consejo de Seguridad- señaló que “China apoya que Rusia y Ucrania resuelvan este asunto mediante negociaciones”.

En esa misma línea, el presidente Xi enfatizó la importancia de “respetar las legítimas preocupaciones de seguridad de todos los países”.

“Se debe abandonar mentalidades propias de la guerra fría y formar un mecanismo de seguridad para Europa equilibrado, efectivo y sostenible, mediante negociaciones”, apuntó Xi.

El líder chino también dijo que China respeta la soberanía y la integridad territorial de todos los países, los cuales deben “adherirse a los propósitos y principios de la Carta de Naciones Unidas”.

“China está dispuesta a trabajar con la comunidad internacional para promover un modelo de seguridad sostenible y basado en la cooperación. Debemos hacer preservar un orden internacional basado en la ley con las Naciones Unidas como actor principal”, agregó. No obstante, Pekín evitó condenar el ataque de Rusia a Ucrania.

1.800

Más de 1.800 personas han sido detenidas de forma arbitraria en Rusia durante las protestas contra la guerra que ha iniciado el Gobierno ruso en Ucrania y se desconoce si algunos han sido liberados, dijo ayer la Oficina de Derechos Humanos de la ONU. Esta cifra oficial triplica la comunicada por la Dirección Principal del Ministerio del Interior de Rusia en las últimas horas.

Chernóbil

El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) informó ayer de que el aumento de radiación en la antigua central nuclear de Chernóbil, tomada por tropas rusas, no supone ningún tipo de peligro para la población. El OIEA indicó que los valores de radiactividad medidos por la agencia nuclear ucraniana, 9,46 microsievert por hora, son bajos y siguen “dentro del rango operativo medido” de la llamada zona de exclusión alrededor de Chernóbil y, por lo tanto, “no suponen ningún peligro para el público”.

Ayuda

El jefe de la oficina humanitaria de la ONU, Martin Griffiths, destacó ayer que en sus 45 años de carrera profesional nunca había visto el grado de incertidumbre que se está registrando en Ucrania, lo que está dificultando los preparativos de ayuda para los ucranianos. “He pasado 45 años lidiando con conflictos por todo el mundo. (...) Nunca he visto una situación así en cuanto a planes de contingencia”, apuntó Griffiths.