- Con citaciones en comisaría, interrogatorios y otros métodos las autoridades cubanas tratan de evitar que los ciudadanos críticos se unan a la ilegalizada marcha del 15 de noviembre, denunciaron ayer activistas y organizaciones. El Gobierno ha insistido en las pasadas semanas en desacreditar la marcha con una intensa campaña en los medios de comunicación estatales y en las redes sociales. Asegura que la convocatoria tiene fines “subversivos” y busca un “cambio de régimen” en Cuba. Así, el principal promotor de la marcha, Yunior García Aguilera, sufrió el 1 de noviembre amenazas de varias personas.