- Su memoria de vida es “la historia del militante y el combatiente saharaui”. Toda una vida dedicada a conseguir el prometido referéndum y la soberanía del pueblo saharaui. Lehebib Breica, delegado del Frente Polisario en Navarra, nació en El Aaiún, actualmente ocupada por las fuerzas marroquíes. Cuando estalló el conflicto saharaui, en 1975, Breica se marchó a servir al Frente Polisario y dejó sus estudios de Derecho en la Universidad Complutense de Madrid. Desde entonces, ha sido embajador itinerante de la causa saharaui en todo el mundo.
Mohamed Gailani, subdelegado del Polisario en Navarra, nacido en Dajla, sirve ahora al Polisario en un plano teórico, pero combatió en la milicia hasta 1989, cuando una noche, haciendo una apertura en el Muro de la Vergüenza, una mina le explotó y perdió la pierna derecha. Desde entonces, se ha dedicado a sensibilizar sobre la causa saharaui en distintas comunidades de la geografía española, hasta aterrizar en Navarra.
¿Qué supone el reconocimiento de EEUU a la soberanía marroquí en el Sáhara?
-EEUU toma una posición equivocada. Sin duda es una mala señal, como superpotencia y como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU. La señal que EEUU debe mandar a Marruecos es que debe cumplir la legalidad internacional, la resolución de la ONU y del Consejo de Seguridad. Aun así, esto no cambia la naturaleza del conflicto. Es una cuestión de descolonización, reconocida como tal en la carta de las Naciones Unidas, y que debe concluir con la autodeterminación del pueblo saharaui.
¿Cambiará Biden de postura?
-Todo esto lo hace Trump en sus últimos coletazos. No lo podemos saber, pero confiamos en que Biden elija la postura que EEUU había tenido hasta ahora, la de apoyo a la determinación del pueblo saharaui. Es la primera vez en la historia del conflicto que se toma una decisión como esta.
¿Qué papel juega Israel en todo esto?
-A Israel le interesa que le reconozcan como Estado. Israel siempre ha tenido problemas con los países árabes para su reconocimiento. En 2002 acordaron que solo reconocerían a Israel cuando este abandonara los territorios que ocupa desde 1967 y aceptara un Estado palestino. El hecho de que cada país vaya individualmente reconociendo a Israel le beneficia porque rompe las filas de la cumbre de Beirut y de todo lo que se pactó ahí.
¿Marruecos ha reconocido a Israel como Estado?
-Claro, van a entablar relaciones. Eso es reconocimiento. Puro y duro. Es lo mismo que está haciendo con Sudán, con Emiratos Árabes, con Baréin...
¿Aumentará la lista de países árabes que entablen relaciones con él?
-Claro. Después vendrá Egipto y Jordania, aunque ya mantienen algunas relaciones. Kushner, yerno de Trump y guardián de la política exterior dijo que Arabia Saudita podría entablar relaciones diplomáticas pronto con Israel, aunque Arabia Saudita se mantiene reacia. ¿Se entiende como una especie de chantaje a Marruecos?
-Trump es un bussines man (un hombre de negocios) y se comporta como tal, también en la política. Kushne, el marido de Ivanka Trump, es además de origen judío. Trump se ha volcado en apoyar a Israel.
Trump asegura que es “un avance para la paz” que Israel y Marruecos restablezcan relaciones.
-Cuando tomas una decisión así, buscas pretextos, buscas cómo justificarte. Pero yo me pregunto ¿la paz para quién? Los palestinos, los mas concernidos, están viendo cómo países que acordaron no reconocer a Israel, lo están haciendo. Trump ha conseguido romper las filas árabes. Cada país va a ir reconociendo individualmente a Israel sin que este se comprometa a hacer nada. ¿Para quién es la paz entonces?
-No para el pueblo saharaui. Reconocer la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara no es buscar la paz, es precisamente ir en contra de ella. ¿Qué dice la paz? La paz dice que el pueblo saharaui tiene derecho a la autodeterminación. La soberanía reside en el pueblo saharaui, y tiene que tener derecho a ejercerla. Lo que hace EEUU es quitarnos ese derecho.
¿Qué tiene el Sáhara tan atractivo para Marruecos?
-Marruecos gana millones con las exportaciones que proceden de las minas de fosfato que controla la compañía estatal marroquí y con la riqueza de la costa atlántica. Allí faenan los barcos de la Unión Europea. Es el acto más grande de piratería que existe. Los europeos pactan con Marruecos para pescar en aguas saharauis.
¿Cómo está la situación en el paso del Guerguerat?
-Marruecos lleva desde el 2000 saltándose los acuerdos internacionales y el alto el fuego, penetrando en una zona desmilitarizada, a la que nadie puede acceder. El Polisario advirtió a la ONU en 2016 que estaban asfaltando el paso, y nos ignoraron. Ante esto, 50 a 60 civiles bloquearon la brecha ilegal durante 25 días. Marruecos acudió al Consejo de Seguridad, pero no consiguió nada. ¿Qué hizo? Mandar 1000 soldados y 200 tanques que rebasaron el muro.
¿Sigue vigente el alto el fuego?
-El Polisario, al no respetarse lo acordado, puso fin al alto el fuego el 13 de noviembre, cuando Marruecos rebasó el muro. Con el alto el fuego, Marruecos podía hacer lo que le daba la gana porque nosotros no atacábamos. Ahora sí. Ahora es cuando van a tener problemas. Nosotros estamos ahora atacando el muro. Todos los días bombardeándolo.
¿Cómo veis la evolución del conflicto en un corto-medio plazo?
-Al violar el acuerdo, Marruecos nos ha dicho que quiere resolverlo militarmente. Una vez que rompes el alto el fuego quiere decir que no aceptas ni lo acordado, ni las resoluciones de la ONU... Para nosotros la violación del alto el fuego lleva a declarar la reanudación de las hostilidades. Y ahora el combate es que reconozcan nuestros derechos.
¿Qué papel juega la MINURSO?
-Como dijo un saharaui, la MINURSO (Misión de la Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental) “son nuestros invitados”. Tenían el papel de llevar a cabo el referéndum de autodeterminación. Treinta años después, seguimos a la espera del referéndum prometido. La consulta se iba a hacer en 1992, seis meses después de que la ONU autorizara la misión, por lo que solo le dieron competencias para supervisar el alto el fuego. No tiene competencias para velar por los Derechos Humanos en la región, lo que la convierte en la única misión de la ONU que vela por los derechos humanos.
“Marruecos ha violado el alto el fuego. Ahora el combate es que reconozcan nuestros derechos”