Kabul - El ataque talibán a un hotel en la provincia de Badghis, en el oeste de Afganistán, finalizó ayer tras unas cinco horas de combates, dejando un saldo de once muertos, entre ellos tres insurgentes, y un número indeterminado de heridos.
El ataque comenzó hacia las 12.40 horas hora local (10.10 hora de Euskadi), cuando varios insurgentes suicidas entraron en un hotel y empezaron a disparar de manera indiscriminada a la gente, concluyendo unas cinco horas después.
“El ataque ha finalizado (...) Tres atacantes murieron y otros dos fueron arrestados”, aseguró el portavoz del Ministerio de Interior afgano. “Desafortunadamente ocho policías murieron”, también confirmó el portavoz.
En el ataque también se produjeron varios heridos, aunque el número exacto es incierto, ya que aunque el jefe del Departamento de Salud informó de tres muertos y 18 heridos, evitó aclarar más tarde si las nuevas víctimas mortales se encontraban entre los heridos.
Los talibanes reivindicaron el ataque a través de un mensaje de su portavoz Qari Yusof Ahmadi, en el que aseguraron que varios de sus combatientes “en busca de martirio entraron en un edificio cerca del cuartel general de la Policía”, donde “el tiroteo continúa”. Otro de los portavoces talibanes, Zabihullah Mujahid, aseguró que habían muerto una treintena de miembros de las fuerzas de seguridad en el ataque.
En los últimos meses sha habido fuertes combates en Badghis entre talibanes y fuerzas de seguridad afganas por el control de varios distritos de esta provincia con gran valor estratégico, ya que comparten frontera con el vecino Turkmenistán, y sirven como paso entre las provincias del oeste y noroeste del país. El pasado abril, al menos 99 talibanes y 12 miembros de las fuerzas de seguridad afganas murieron tras enfrentamientos por el control del distrito de Bala-Murghab. - Efe