Hong Kong - Algunos partidarios de la polémica propuesta de ley de extradición pidieron ayer al Ejecutivo hongkonés que suspenda temporalmente el proyecto para desactivar la crisis que ha desatado, mientras cientos de manifestantes volvían a las calles en una protesta convocada por las Madres de Hong Kong. En la sentada de ayer viernes se congregaron medio millar de personas -muchas de ellas madres de los manifestantes heridos tras las cargas policiales del miércoles- portando lazos y claveles blancos para pedir a la Policía que “dejen de disparar” a sus hijos y que “devuelvan Hong Kong a la gente”.

“Carrie Lam -la jefa del Ejecutivo- dijo que apoyaría a la juventud cuando fue elegida y mira lo que está haciendo”, dijo Tina Luk, una de las madres presentes en la sentada y que se ha convertido en un icono por encararse a los agentes y pedirles que la pegaran a ella antes que a los chicos que protestaban. “Encontré fuerza por mi propia responsabilidad de madre. No tenía miedo, fue un instinto natural. Quise ayudarles”..

setenta heridos Por su parte, la profesora universitaria Susanne Choi, una de las organizadores de la marcha de ayer, recordó a Lam que los 70 heridos durante las protestas fueron fruto de la violencia, y que las madres no callarán si vuelven a ver a “jóvenes golpeados y cubiertos de sangre”.

En la otra cara de la moneda, un integrante del Consejo Ejecutivo hongkonés, Bernard Chan, sugirió ayer a Lam que evalúe la situación a raíz de las protestas porque “es imposible discutir este proyecto de ley bajo tal confrontación”, en declaraciones a una radio local. “Nuestra primera tarea ahora es tranquilizar a la gente para evitar más enfrentamientos”, añadió. Chan admitió haber subestimado la reacción de la comunidad empresarial ante la polémica legislación, que permitiría la transferencia de prófugos a jurisdicciones con las que Hong Kong no tiene un acuerdo de extradición, incluida China continental.

Además, veintidós exfuncionarios del Gobierno de Hong Kong instaron a Lam a que retire su plan. “Esta es nuestra futura generación y debemos tenerla en cuenta. ¿Cómo puede alguien con corazón no sentir dolor al ver el tratamiento que le hemos dado?”, incidió este grupo en una declaración. También pidieron a los parlamentarios que tienen mayoría en el Legislativo que voten en contra y que trasladen a Lam la opinión de la calle, e incluso que renuncien si no son escuchados. “Una sociedad profundamente dividida y la grave preocupación de la comunidad internacional. ¿Son necesarios estos sacrificios para satisfacer la voluntad de la jefa del Ejecutivo? ¿A quién beneficia la aprobación apresurada de este proyecto de ley? ¿Adónde va a llevar la escalada de la fuerza (policial)?”, se interrogó. - Efe