CARACAS. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, volvió hoy a lanzar acusaciones contra Estados Unidos al señalar que el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton, dirige un plan con el apoyo de Brasil y Colombia para derrocarlo y asesinarlo.

"Hoy vengo otra vez a denunciar el complot que desde la Casa Blanca se prepara para violentar la democracia venezolana, para asesinarme y para imponer un Gobierno dictatorial en Venezuela", dijo el jefe de Estado en rueda de prensa.

Aseguró que los supuestos conspiradores asignaron "nuevamente" a Bolton como jefe del complot "para llenar de violencia Venezuela y para buscar una intervención militar extranjera, un golpe de Estado, asesinar al presidente Maduro e imponer lo que llaman ellos un consejo de gobierno transitorio".

Según Maduro, el asesor estadounidense ha estado asignándole misiones al presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, "para provocaciones militares en el sur de Venezuela, en la frontera" que comparten ambos países.

"Hamilton Mourao (vicepresidente electo de Brasil) declara todos los días como presidente paralelo en Brasil (...) todos los días fija la pauta de lo que va a ser la política de ese gobierno (...) todos los días dice que va a invadir a Venezuela, que Brasil va a utilizar sus fuerzas militares", indicó.

El líder chavista dijo que en cambio a Bolsonaro "casi ni se le oye la palabra, la voz" y auguró que entre ambos países "va a haber paz y cooperación" pese a que el vicepresidente brasileño, dijo, es un "loco cobarde".

Asimismo, indicó que Colombia "es cómplice" de este supuesto plan de Estados Unidos, algo que ya ha rechazado el presidente de Colombia, Iván Duque.

Maduro dijo contar con información de inteligencia obtenida por su Gobierno, según la cual se "está entrenando un grupo paramilitar denominado el G8" en el departamento colombiano del Norte de Santander.

"Se están entrenando 734 mercenarios, entre colombianos y venezolanos para en cualquier momento hacer acciones llamadas de 'falsos positivos' (...) hacer ataques a unidades militares en la frontera e iniciar una escalada violenta que confunda a la opinión pública y justifique cualquier otra acción militar contra Venezuela", detalló.

También dijo que su Gobierno maneja la información de que se están entrenando "fuerzas de comando" en la Base de la Fuerza Aérea Eglin en los Estados Unidos "para una agresión quirúrgica contra bases aéreas y bases militares venezolanas".

Las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos, uno de los principales destinos del petróleo de la nación caribeña, es tensa desde que el chavismo llegó al poder en 1999 y en la actualidad los países no comparten embajadores.

La relación se volvió, además, más difícil desde que Donald Trump llegó a la Presidencia a comienzos de 2017 y dijera de forma pública en agosto de ese mismo año que no descartaba la "opción militar" para resolver el "muy peligroso lío" que atraviesa Venezuela.

El Gobierno de Maduro ha rechazado en múltiples oportunidades los pronunciamientos que realiza Washington sobre la situación en Venezuela alegando "intromisión" en sus asuntos internos.

Precisamente hoy el presidente venezolano indicó que instruyó al Ministerio de Exteriores para que cite a James Story, encargado de negocios de Estados Unidos en el país, y le exprese las molestias del Ejecutivo por la presunta intromisión en los asuntos internos de Venezuela.

Maduro aprovechó, además, su rueda de prensa para dejar claro que no aceptará "chantaje" diplomático en vista de la posibilidad de que algunos países retiren sus embajadores por considerar ilegítima su reelección, que se dio en un escenario electoral en el que el grueso de la oposición no participó.

"Los gobiernos que hagan lo que quieran, si se quieren ir de Venezuela con sus embajadores, que se vayan todos, que se vayan. A Venezuela no la va a chantajear nadie", dijo el líder chavista, que comenzará un nuevo mandato el 10 de enero de 2019.

"Venezuela tiene suficientes amigos en el mundo que nos respetan y nos quieren. Las más importantes potencias de este mundo nos respetan y nos apoyan y nos quieren", agregó.

El presidente venezolano ha afianzado en las últimas semanas sus relaciones con Turquía, China y Rusia, tras sostener encuentros y firmar convenios con representantes de estos países.

En ese sentido, defendió lo que consideró como "planes naturales de cooperación" militar y petrolera con Rusia, después de la controversia que causó la presencia en el país de una escuadrilla de aviones de la fuerza aérea rusa.