Bruselas - El Tribunal de Justicia de la Unión Europea validó ayer el acuerdo pesquero entre la UE y Marruecos porque considera que no es aplicable al Sáhara Occidental ni a sus aguas adyacentes debido a que el Sáhara occidental no es Marruecos, lo que supone que los buques europeos no deben faenar en esa zona en el marco del pacto. Los jueces europeos señalaron que “habida cuenta de que el territorio del Sahara occidental no forma parte del territorio del Reino de Marruecos, las aguas adyacentes al territorio del Sahara occidental no están comprendidas en la zona de pesca marroquí, objeto del acuerdo”.

Según las cifras de la Comisión Europea recogidas por el abogado general Melchior Watehlet, sólo las capturas efectuadas en esa zona de pesca representan aproximadamente el 91,5% del total de la realizada por buques europeos en el marco del protocolo de 2013. Las conclusiones del letrado publicadas en enero señalaban que “ello demuestra que desde un primer momento lo que las partes precisamente contemplaban es la aplicación a las aguas adyacentes al Sáhara Occidental”.

Aunque el protocolo actual que acompaña al acuerdo pesquero -que caduca en julio- no contiene ninguna disposición sobre el ámbito territorial de aplicación, según el tribunal, sí utiliza la expresión “zona de pesca marroquí” que se define como “las aguas bajo soberanía o jurisdicción del Reino de Marruecos”. El Tribunal de Justicia deduce de ello que la “zona de pesca marroquí” de que habla el protocolo no debe incluir las aguas adyacentes al territorio del Sáhara Occidental porque Marruecos no tiene ninguna jurisdicción sobre ellas. La CE, que ya ha empezado a preparar las negociaciones con los países y el sector para la renovación del protocolo, dijo ayer que “está examinando” el contenido de esta decisión “para determinar las consecuencias y las eventuales medidas a tomar”, afirmó la portavoz de Exteriores Catherine Ray en la rueda de prensa diaria de la institución. “La UE va a cooperar estrechamente con Marruecos sobre esta cuestión (...) seguimos determinados a analizar los instrumentos necesarios”, dijo, insistiendo en que “Marruecos es un socio clave” .

Incertidumbre España captura 7.400 toneladas al año en el marco del acuerdo actual, vigente desde 2013, con un valor económico que alcanzó 58 millones de euros en los últimos cuatro años. La sentencia alivia los temores de la industria y de los países de un posible conflicto con Marruecos, que ya había alertado de que un fallo contrario cuestionaría todos los acuerdos bilaterales y abriría una grave crisis diplomática. Sin embargo, ésta genera incertidumbre dado que, aunque valida el acuerdo, excluye las aguas del Sáhara Occidental, importantes para la flota española, según afirmó el secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat.

Por otra parte, la organización saharaui Western Sahara Ressource Watch (WSRW) consideró que la sentencia es “una buena noticia” y que esta lanza un mensaje a Bruselas y a los armadores europeos. - Efe