Bruselas - El negociador jefe de la Unión Europea para el Brexit, Michel Barnier, aseguró ayer que el periodo de transición de unos dos años una vez que el Reino Unido abandone el club comunitario en 2019 no se puede “dar por hecho” si persisten los desacuerdos entre Londres y Bruselas sobre la cuestión. “Tomando en consideración estos desacuerdos y para ser muy franco, la transición no está hoy garantizada. Si estos desacuerdos persisten, la transición no se puede dar por hecha”, afirmó el político francés durante una rueda de prensa posterior a la última ronda de negociación sobre el Brexit.
Los Estados miembros que seguirán en la UE tras el Brexit aprobaron el 29 de enero las directrices que fijan su posición para negociar el periodo transitorio, ya pactadas por los jefes de Estado y de Gobierno en una cumbre el 15 de diciembre.
La transición se prolongaría desde la salida efectiva de Londres de la UE, prevista para el 29 de marzo de 2019, hasta el 31 de diciembre de 2020, y en ese tiempo seguirían aplicándose en el Reino Unido todas las leyes comunitarias ya en vigor como si el país fuese aún un Estado miembro, así como aquellos cambios en este acervo comunitario que sean aprobados por la Unión durante esos dos años.
El excomisario indicó que, si bien el Reino Unido ha insistido en alcanzar un pacto sobre ese tema en marzo, ha transmitido “al mismo tiempo” ciertos desacuerdos que calificó de “sustanciales” en ámbitos como los derechos de los ciudadanos y la aplicación de las reglas europeas durante la transición.
Así, criticó que el Gobierno británico no esté dispuesto a reconocer los derechos de los ciudadanos que lleguen a su territorio durante el periodo de transición, entre marzo de 2019 y diciembre de 2020. “Es una cuestión de gran importancia para nosotros y también para el Parlamento Europeo”, declaró. Precisó que el Reino Unido ha pedido un “derecho de oposición” cuando no esté de acuerdo con nuevas leyes o reglas que entren en vigor durante el periodo de transición.
Añadió que en los ámbitos de justicia e interior Londres desea seguir beneficiándose de su derecho a participar en las nuevas políticas europeas, pese a haber decidido abandonarlas a partir del 31 de diciembre de 2020. - Efe