Caracas - Cientos de ciudadanos venezolanos se concentraron ayer en el este de Caracas para honrar la memoria del inspector alzado contra el Gobierno de Venezuela Óscar Pérez y las otras seis personas de su grupo abatidas en una acción policial que muchos de los presentes calificaron de “ejecución sumaria”. “¿Cómo es posible que a esos héroes de la patria los hayan matado, asesinado después de tirar esa bomba? Los masacraron, y luego no se los entregaron a sus familias”, criticó una de las asistentes, que no quiso dar su nombre.

El Parlamento venezolano, de mayoría opositora, citó el pasado viernes al ministro de Defensa, Vladimir Padrino, para que explique el operativo del lunes, en el que murieron nueve personas, siete de ellas “terroristas” según el Gobierno y entre las que estaba el expolicía Óscar Pérez. El titular de Defensa y el comandante de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), Richard López, tendrán que acudir a rendir cuentas del operativo, aunque presumiblemente no lo harán, como ha sucedido en otras ocasiones.

Las denuncias por este operativo se suceden y ayer se conoció un hecho que encendió más los ánimos: el agente alzado contra el Gobierno Óscar Pérez y cinco de los otros seis integrantes de su grupo de sublevados murieron de un disparo en la cabeza, según la organización Foro Penal, que tuvo acceso a las actas de defunción.

“El equipo de Foro Penal ha estado con ellos (los familiares) y las vio (las actas)”, explicó el director ejecutivo de esta ONG que defiende a los detenidos y muertos por motivos políticos en Venezuela. Según Alfredo Romero, la causa de las muertes de Pérez y de otros cinco miembros del grupo fueron provocadas por el impacto de un proyectil en la cabeza. El agente restante perdió la vida por un disparo en la cervical.

Para algunos observadores, la confirmación de los disparos en la cabeza da fuerza a la hipótesis de una “ejecución”. Los familiares de los fallecidos en el operativo policial del lunes -calificado de “ejecución extrajudicial” por la oposición y organizaciones pro derechos humanos- llevan toda la semana acudiendo a la morgue de Caracas, donde estaban reclamando que se les entreguen los cuerpos. Foro Penal ha contabilizado más de 20 detenidos -entre ellos 8 oficiales de las Fuerzas Armadas- en relación con el “caso Pérez”. Uno de los arrestados es un amigo de infancia de Óscar Pérez, que fue secuestrado por desconocidos días antes de la operación que dio muerte a los sublevados y fue detenido el miércoles por la Contrainteligencia Militar en el principal aeropuerto de Venezuela cuando intentaba irse del país. Romero explicó que Foro Penal desconoce su paradero desde la detención.

El Gobierno de Nicolás Maduro considera “terroristas” a Pérez y los hombres que se le unieron. El inspector de la Policía científica se alzó en junio, cuando sobrevoló Caracas con un helicóptero de ese cuerpo policial y mostró un mensaje llamando a la desobediencia. En un vídeo publicado en redes sociales, Pérez decía contar con varios militares y civiles dispuestos a acabar con la “tiranía” chavista, y llamaba a un alzamiento popular y militar contra el Gobierno de Maduro.

Desde la clandestinidad, Pérez publicó varios vídeos más de esas características, y en diciembre volvió a actuar al liderar un asalto a un cuartel militar en el que sometió a los soldados sin violencia y les recriminó que siguieran apoyando a la “dictadura” de Maduro pese a la grave situación en que se encuentra el país. El grupo alzado también sustrajo armamento del cuartel en esta operación. Pérez y seis personas de su grupo fueron encontrados el lunes en una casa del barrio caraqueño de El Junquito. - Efe