RÍO DE JANEIRO. El accidente se produjo a primeras horas de la noche por causas que aún se desconocen, aunque el conductor, que ha sido detenido, argumentó que perdió la consciencia por un ataque epiléptico. Los heridos fueron trasladados de inmediato a centros sanitarios con lesiones de diversa consideración aunque, según fuentes policiales consultadas por Efe, al menos hay dos en estado grave.

El bebe fallecido se encontraba aparentemente en un cochecito que fue embestido por el automóvil fuera de control.

Testigos declararon que el vehículo, un Hyundai i30 negro, circulaba a gran velocidad, aunque el tráfico en la zona a la hora en que se produjo el accidente acostumbra a ser lento, y que el conductor giró repentinamente hacia la derecha y se subió al paseo.

"Había mucha gente en la acera, había incluso gente debajo del auto", relató una turista argentina que presenció el suceso.

"Las sillas volaban, no nos dimos cuenta de que era un coche hasta que vimos a la gente en el suelo y había un bebé herido", añadió.

El conductor, un hombre de 41 años, según medios locales, ha sido detenido y la policía investiga las causas del siniestro y si es cierto que sufrió un ataque epiléptico.

La cadena Globo informó de que dentro del coche se encontraron medicinas utilizadas en el tratamiento de la epilepsia.

La orla de la playa de Copacabana, la más turística de Río de Janeiro, está abarrotada en las noches del verano austral, por su ciclovía corren y pedalean cientos de personas y los numerosos quioscos de la playa acostumbran a estar abarrotados.