Beirut - Turquía atacó ayer con artillería posiciones de las milicias kurdas en la región de Afrín, en el noroeste de Siria, coincidiendo con las amenazas del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, sobre el inicio “en cualquier momento” de una operación armada contra ese enclave. En declaraciones telefónicas, el responsable de Relaciones Exteriores de Afrín, Suleiman Yafar, afirmó que “al amanecer, las fuerzas turcas atacaron desde Azaz (al este de Afrín) las áreas de Ain Daqna y Maranaz y, desde el oeste, Deir Balut y Yindirís”. Además, agregó, “anoche, sobre la 22.00 horas Turquía abrió fuego de artillería contra la zona de Qara Baba, en la frontera”. Con estos ataques, “la artillería turca ha tenido como blanco Afrín y todos sus alrededores” en las últimas horas, apuntó Yafar.
Situado en el noroeste de la provincia de Alepo, en la frontera con Turquía, Afrín está bajo el control de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza encabezada por milicias kurdas que tiene el apoyo de la coalición internacional comandada por EEUU. Yafar explicó que los ataques contra Afrín son habituales por parte de los grupos rebeldes e islamistas sirios que están respaldados por Turquía, pero en esta ocasión ha sido el propio Ejército turco el que ha lanzado los proyectiles contra la región.
No obstante, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, se han desencadenado choques entre las FSD y facciones opositoras sirias aliadas de Turquía en áreas próximas a Afrín, como Ain Daqna y Maaranaz. El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, había amenazado con iniciar una operación militar “en cualquier momento” en Afrín y en Manbech, también en el norte de Alepo y, asimismo, en manos de las FSD. “Las Fuerzas Armadas turcas resolverán el problema de Afrín y Manbech. Los preparativos están ya completados. La operación puede comenzar en cualquier momento “, dijo Erdogan en en Ankara. El Gobierno turco considera “terroristas” a las milicias kurdas Unidades de Protección del Pueblo (YPG), que son el principal componente de las FSD, y a las que ve como una mera filial de la guerrilla kurda de Turquía, el Partido de los Trabajadores del Kurdistán.
A esta escalada de tensión también ha contribuido la iniciativa de EEUU y las milicias kurdosirias de crear una nueva fuerza que se desplegará en zonas fronterizas.
El “plan” “Las FSD, en cooperación con la coalición y EEUU, tenemos un plan para 2018 de crear una guardia fronteriza federal con 30.000 combatientes”, reveló por teléfono el director de la oficina de Información de las FSD, Mustafa Bali.
Ese contingente operará en áreas de la administración autónoma kurdosiria, bajo control de las FSD, limítrofes con Turquía e Irak. “También trabajará en las líneas de contacto con el régimen en la región del Éufrates”, detalló Bali, en referencia a las provincias nororientales de Al Raqa y Deir al Zur, donde hay presencia de las autoridades sirias y de las FSD. Bali añadió que esa guardia fronteriza está recibiendo ya entrenamiento y, tan pronto como lo termine, iniciará su misión.
Las reacciones no se han hecho esperar y Turquía, Siria y Rusia han condenado esos planes. En su discurso de ayer, Erdogan criticó con dureza ese proyecto. “EEUU ahora admite que está creando un Ejército terrorista a lo largo de nuestra frontera. Lo que tenemos que hacer es ahogar ese ejército antes de que nazca”, zanjó Erdogan.